DPTO. DE COMUNICACIÓN FBM
Fotos: FEB
La selección del Líbano no quería ser un invitado de piedra en el Preolímpico y plantó cara en los primeros minutos (6-5 a 7:24) con la movilidad de Jad Khalil y la fuerza de Omari Spellman como argumentos. Los triples de Sergio Llull y Xabi López-Arostegui pusieron orden y empezaron a abrir hueco en el marcador, pero Líbano resistió ese primer envite y volvió a acercarse (13-15 a 3:30). Tocaba tirar del (muy superior) fondo de armario y Sergio Scariolo movió piezas: Juancho Hernangómez, Usman Garuba, Juan Núñez, Darío Brizuela... Poco a poco, paso a paso, con todos aportando, la brecha volvió a abrirse con un parcial de 0-9, aunque el primer cuarto se cerró con un triplazo de Spellman, el 18-24.
El segundo período se abrió con un parcial de 0-7 en minuto y medio, triple de Rudy Fernández incluido. España no quería sustos. El combinado del Líbano intentó reaccionar desde la línea de triple, pero la selección ya había marcado distancias (21-37 a 5:12). Y un palmeo de Jaime Pradilla certificó que en #LaFamilia todos suman. Asegurando el rebote defensivo y con numerosas soluciones en ataque, España llegó al descanso con 19 puntos de ventaja: 31-50.
La selección del Líbano mostró su orgullo al comienzo de la segunda mitad (35-51), pero el triple de Llull y el alley oop Brown-Aldama cortaron de raíz ese conato de reacción. Otro triple, de Aldama, alargó la brecha por encima de los veinte (38-61)... aunque solo fuera por unos segundos. Porque el tercer cuarto fue un intercambio de golpes. El marcador, siempre por encima de los veinte, ya empezaba a pintar poco y se trataba de seguir creciendo. De reforzar el papel de Aldama (MVP del partido), los galones de Brown y la confianza de todos. El encuentro llegó el tercer cuarto con 44-78 y en el último continuó el reparto de focos: dos triples consecutivos de Brizuela, una finta de Garuba (para el +40), un triple de Alberto Díaz... Buenas sensaciones para las próximas citas.