Estadísticas de la final de la Minicopa / Partido completo

El duelo entre los dos máximos favoritos de la competición arrancó ante casi 9.000 espectadores en el Olimpic de Badalona (y otros tantos online) y con igualdad en el marcador (2-2, 4-4, 7-7..). Los dos equipos se empleaban a fondo desde el principio. El Real Madrid aprovechaba la fuerza del malí Mahamadou Landoure, pero enfrente el Barça oponía presión en defensa, velocidad en ataque y un juego muy directo, mirando al aro en todo momento. Los azulgrana mantuvieron una mínima ventaja (9-11)... hasta que dos triples llevaron al 11-20. Otro, de Hugo Tamayo, contó el intento de reacción del Madrid. Por el camino más rápido, a golpe de triple, el Barça intentaba escaparse. Al final del primer cuarto, 13-24.

Por detrás en el marcador, el Madrid salió con un punto más de intensidad. Sin embargo, el Barça seguía sorprendiendo a la contra. Max Teixidó, invitado por el Madrid, abrió el intento de reacción blanco, pero era muy difícil frenar a un rival infalible desde lejos, que llegó a ponerse a +16 (15-31). Había que jugársela, como hicieron Osa Hadi, Aaron Ona y Adrián Arredondo. El Madrid empezó la escalada y poco antes del descanso ya había recortado la mitad del camino (28-36). Otra vez Landoure imponía su dominio en la pintura. El Barça volvió a recurrir a los triples para mantenerse por delante, pero el 36-45 del descanso dejaba todo en el aire para la segunda mitad.

Una segunda parte que empezó con otro triple de los azulgrana, decididos a mantenerse por delante. Pero el Madrid estaba empeñado en remontar y no tardó en ponerse a tres (45-48). Cuando Landoure anotó cuatro puntos más, culminando la remontada, llegó el parón en el banquillo azulgrana. Su técnico, Oriol Barrera, reclamó más velocidad. Empezaba un partido nuevo, tan igualado como al principio (56-56 a 1:35), que llegó al último cuarto con mínima ventaja del Madrid: 60-58. La final estaba en un pañuelo (62-62 a 8:17). Ya por encima de los 40 puntos, el MVP Landoure seguía impulsando al Madrid, pero el Barça aguantaba desde fuera. A 6:40 para el final, el Madrid se alejó ligeramente (68-64); una renta escasa pero muy importante en un partido así, que se mantenía tres minutos después (70-66) y se alargó hasta los ocho gracias a un parcial de 10-2. El Madrid despejaba por fin el camino hacia repetir el título. Con Landoure imparable y el resto del equipo aportando en todos los terrenos, los blancos ampliaron la brecha a toda velocidad (77-66 a 2:09) hasta el mate final del malí y la fiesta con la Minicopa en los brazos.