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El Real Madrid, campeón de las seis últimas ediciones de la Minicopa, confirmó su condición de favorito en su estreno en el torneo que se celebra en el Magariños. Los blancos superaron al Movistar Estudiantes por 82-31 cerrando el marcador en el tercer cuarto. La mezcla de físico (18 puntos y 13 rebotes para Abdou Ndiaye) y técnica del Madrid pudo con un Estu que, fiel a su estilo, intentó combatir imponiendo un ritmo endiablado al partido. La Minicopa seguiá vistiendo de fiesta el Magariños hasta el sábado. La gran final del domingo se disputará en el WiZink Center.
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REAL MADRID 82 - ESTUDIANTES 31
El primer partido de la Minicopa comenzó a toda velocidad, sobre todo por parte de un Estudiantes que arremetía contra la canasta blanca con valentía pero sin suerte. Los nervios del estreno pesaban en los dos equipos, muy acelerados y quizá por eso también imprecisos. Una falta a Abel Delicado trajo el primer punto del partido desde la línea de tiros libres, aunque enseguida llegó el 1-2 de Jeremy Pinales. El Estudiantes seguía intentando enloquecer el juego, quizá la única forma de contrarrestar la superioridad física del Madrid, más evidente bajo los tableros con Abdou Ndiaye y Kaya Mutambirwa. Sin embargo, poco a poco, ese músculo se fue reflejando en el marcador y a los cuatro minutos y medio, el Madrid ya mandaba por 8-2.
Kaya Mutambirwa intenta superar la defensa del Estudiantes.
Los cánticos de la Demencia en las gradas del Magata impulsaban al Estu, pero ahí estaba Ndiaye para matar el 10-2 con una facilidad pasmosa. El triple de Hugo Bermejo sí fue una alegría para los colegiales, que se acercaron en el marcador (12-7), aunque solo momentáneamente porque el primer cuarto se cerró con un claro 28-9 y la mitad de los puntos blancos repartidos a partes iguales entre Ndiaye y Mutambirwa.
Jorge Oliva amplió la ventaja del Madrid al poco de empezar el segundo periodo. Pese a la diferencia, los colegiales no bajaban los brazos y seguían arremetiendo contra el tablero de su rival pasara lo que pasara. En defensa, su trabajo también era incansable, aunque el triple de Álex Hernández al límite de la posesión significó el 35-10. Pese a que el encuentro volvió a enloquecer durante algunos minutos y a las continuas rotaciones del Madrid, la diferencia no dejó de aumentar. Un triple de Delicado supuso el 44-11 a 6:10 y, poco después, Adrián Bazaga se coló entre tres rivales para hacer el 46-13. Al Estu le quedaron los triple de Bermejo y Andrés Mayo, que sirvieron para retrasar el cierre del acta: El partido llegó al descanso con un mate de Ndiaye, el 63-25.
Mateo Batlle avanza hacia el terreno del Real Madrid.
La segunda mitad se abrió con dos puntos desde media distancia de Mutambirwa, pero también con la réplica de un Estu dispuesto a competir hasta el último momento y siempre fiel a su estilo de pensar rápido y actuar aún más rápido.... A 7:42, el marcador estaba en 67-27. Jan Vide (invitado por el Madrid al torneo) amplió la renta, siete puntos seguidos de un demoledor Ndiaye dejaron el partido al borde del cierre y Álex Hernández sentenció.
Los árbitros y oficiales de mesa de la FBM que dirigieron el primer partido.
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