El Real Madrid se enfrentará al Divina Seguros Joventut en la segunda semifinal de la Copa del Rey, que se celebra en el WiZink Center. Los blancos cumplieron el pronóstico en el duelo madrileño y vencieron por 94-63 a un Movistar Estudiantes que se quedó atrás en el segundo cuarto (de 29-27 al 50-34 del descanso) ante la tremenda pegada de su rival. Gustavo Ayón y Gabriel Deck fueron los máximos anotadores del partido con 16 puntos cada uno. Pero para actuación individual la de Nico Laprovittola, que, en el primer partido del día, guió al Divina Seguros Joventut a la semifinal con una descomunal actuación: 36 puntos anotados, 7 asistencias, 4 rebotes... ¡y 50 de valoración!, nuevo récord histórico de la Copa. Fotos: ACB Photo

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Cuartos de final. REAL MADRID 94 - MOVISTAR ESTUDIANTES 63

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El Movistar Estudiantes salió con la intención de buscar la sorpresa como quedó claro con la primera canasta del partido, un mate de Víctor Arteaga, pero la reacción del Madrid fue fulminante. Cuando el partido se tranqulizó, a los dos minutos, el marcador estaba en 6-5. Pese al buen trabajo en defensa de los dos equipos, las mínimas ventajas a favor de unos y otros se sucedieron... hasta que Gabriel Deck y Gustavo Ayón dieron aire a un Madrid que empezaba a mostrar su pegada. Aunque el triple de Omar Cook estrechó el marcador (15-14), el Madrid llegaba antes y mejor. Los mejores ejemplos fueron los dos triples consecutivos de Jaycee Carroll y Anthony Randolph (21-14). Cuando Ayón amplió la ventaja, el banquillo colegial paró el crono. El primer cuarto continuó con un intercambio de golpes y con el Madrid siempre por delante, aunque el triple de Gian Clavell dejó el primer parcial en un ajustado 29-27.

Jeff Taylor respondió con otro triple nada más empezar el segundo cuarto. El Madrid no quería sustos y estaba decidido a escaparse cuanto antes. Para ello nada mejor que aprovechar su extraordinaria capacidad de rotación. El único problema era que no todos los tiros querían entrar. Sí lo hizo, en cambio, el triple de Nik Caner-Medley, el 34-30 a siete minutos para el descanso. Sin embargo, un triple de Rudy Fernández alejó un poco más a los blancos, que empezaron a optar por la vía rápida...¡Acelerón y escapada!. A 4:30 para el descanso, el Madrid estaba diez arriba (42-32) y, lo más importante, empezaba a mostrarse nuy superior, sobre todo bajo el aro con un intratable Walter Tavares, que recibió la asitencia de Facu Campazzo para anotar el 50-34 con que se llegó al descanso.

El Madrid mantuvo esa efectividad al comienzo de la segunda mitad. Cada ataque terminaba dentro y en menos de tres minutos se superaron los veinte puntos de diferencia: 58-37. El tercer triple de Carroll dio todavía más alas a los blancos, ya lanzados hacia la semifinal del sábado, y el 63-39 de Ayón provocó el tiempo muerto en el banquillo estudiantil. Pero el partido ya tenía dueño. El Estu solo podía intentar maquillar el marcador y aprovechó la (inevitable) relajación de los blancos para frenar la sangría. Con posesiones más largas, el ritmo anotador bajó, aunque un triple de Deck cerró el tercer periodo (73-48) y un mate de Tavares abrió el último. Un acto final sin mucha historia, en el que el Madrid amplió su ventaja poco a poco mientras Pablo Laso repartía minutos pensando ya en la exigente semifinal del sábado. Espera Laprovittola.

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