El Real Madrid no pudo empezar mejor la Copa del Rey, dominando el rebote y cogiendo distancia en el marcador enseguida (17-9, 21-11...). Gabriel Deck fue el protagonista del primer cuarto con 10 puntos en su cuenta personal, entre ellos los que fijaron el +12 (29-17) con que terminó ese periodo. En el segundo, el Valencia Basket intentó acercarse, pero a los tres minutos todo seguía igual (35-20) con un Madrid tirando de plantilla ante un rival que no encontraba soluciones. Lo que sí consiguieron los valencianos, impulsados por Mike Tobey y Martin Hermannsson, fue ponerse a nueve (38-29) e incluso a siete (40-33) pero hasta ahí... Fabien Causeur alejó el peligro con una contra, dos triplazos de Sergio Llull y Rudy Fernández llevaron al +14 (48-34) y la técnica por flopping de Klemen Prepelic al 49-34 con que se llegó al descanso.

 

Al comienzo de la segunda mitad Jaycee Carroll, Edy Tavares y Trey Thompkins reclamaron su cuota de protagonismo hasta provocar el tiempo muerto de Jaume Ponsarnau con 57-38. Nada más salir del banco Deck elevó la distancia por encima de los veinte. El despertar de los valencianos tardó un poco, pero llegó... Primero Prepelic acertó desde el triple (al quinto intento) y después San van Rossom le acompañó (59-47). El Valencia Basket seguía en el partido, aún más tras otra canasta de Van Rossom, que lideró la reacción con cuatro puntos consecutivos más para un sorprendente parcial de 0-15 (59-53). El partido llegó al último cuarto vivo: 63-55. Nikola Kalinic empujó a su equipo al comienzo del último periodo, pero enseguida apareció de nuevo la figura de Deck, que cortó el atisbo de remontada y concedió al Madrid un colchón de puntos que Thompkins y Tavares consolidaron (76-62 a 5:04). Una renta suficiente para llevarse la victoria, culminada con el mate final de Thompkins (igualando los 23 puntos de Deck), y el pase a las semifinales.