DAVID GONZÁLEZ / DPTO. DE COMUNICACIÓN FBM
Fotos: Rocío Benítez

SEMIFINALES

Real Madrid 118 (33+26+29+30): Mahamadou Landoure (17), Manuel Antonio García (10), Andrej Bjelic (20), Ilia Frolov (19), Gunars Grinvalds (9) -cinco inicial- Maximiamo Haro (6), Omer Kutluay (6), Guillermo Rodríguez (4), Marcos Zurita (18), Rafael Corta (6), Moussa Manel (3) y Osa Hadi.

Real Canoe 49 (21+9+6+13): Miguel Álvarez, Jorge Moreno (5), Iyayi Igbinedion (10), Alejandro García (3), Miguel Ropero (4) -cinco inicial- Denis Butunoi (4), Luis Álvarez-Ossorio, Hugo Rodríguez (2), Daniel Ramos (8), Mario Bustinza (2), Mateo Novo (5) y Eyuel Serrano (6).

Árbitros: Becerril y Fermín.

Acta digital en SWISH (NBN23)

Partido completo en FBMTV

El poder del Madrid quedó claro desde la primera jugada, una acción individual de Manuel Antonio García; que el Canoe estaba dispuesto a plantar cara, con la segunda, el triple de Iyayi Igbinedion. Con los dos equipos ofreciendo lo mejor de sí mismos, el marcador arrancó a toda velocidad, aunque con los blancos por delante (9-6 a los tres minutos). Otro triple de Iyayi fijó las tablas y la falta que sacó Miguel Ropero puso al Canoe por delante. Un breve paréntesis porque poco a poco el Madrid volvió a tomar el mando (22-14 a 4:10). Pese al triplazo de Mateo Novo o la penetración de Eyuel Serrano, el primer cuarto se cerró con 33-21 para un Madrid infalible en ataque.

Andrej Bjelic e Ilia Frolov llevaban el peso de la ofensiva blanca, pero en este Madrid todos suman. La maquinaria ya estaba a pleno rendimiento y la distancia creció al comienzo del segundo periodo con un parcial de 7-0. El Canoe seguía combatiendo a base de velocidad y atrevimiento (Ropero lo demostró colándose entre la defensa), pero la brecha era cada vez mayor... sobre todo porque Mahamadou Landoure imponía su dominio bajo los tableros. El maliense mandaba por dentro y Bjelic por fuera. Dos triples seguidos del serbio llevaron el marcador hasta 52-28. Al descanso, Bjelic ya estaba en 18 puntos y el marcador en 59-30.

La segunda mitad comenzó igual, con el Madrid golpeando. Frolov se coló bajo el aro para hacer el 63-30. El ruso tomó el relevo de Landoure como dominador en la pintura, mientras Marcos Zurita, Maximiano Haro y el resto de sus compañeros demostraban su calidad desde todas las posiciones. El mate de Rafael Corta fue el ejemplo más contundente. El tercer cuarto acentuó el dominio de un Real Madrid que llegó al último con 88-36. El Canoe aún tuvo momentos para demostrar su capacidad de lucha (la valiente penetración de Ropero ante Landoure), pero la semifinal ya estaba en manos de un Real Madrid que demostró la calidad de toda su plantilla. Frolov llevó a su equipo por encima de los cien (101-41 a 5:35) y Tomás Punzano prolongó el bombardeo con dos triples.

Zentro Basket Madrid 89 (24+22+21+22): Jorge Mas (3), Pedro Stuardo (6), Mateo Vigneault (18), Slava Okunsky (2), Gabriel Fata (13) -cinco inicial- Darío García (13), Oskar Ostoft (2), Javier Sanguino (7), Pedro Mercado, Ousmane Sanogo (4) y Jayden Anike (21).

Movistar Estudiantes 72 (13+23+21+15): Haile Aparicio (5), Joseph Tusamba (2), Mario Lorenzo (7), Dapete Carungal (15), Sergio Fole (1) -cinco inicial- Theo García Fischtel (2), Mario Lozano (5), Iván Montero, Jorge Cano (11), Javier Beas-Pérez de Tudela (4), Yago Alonso (6), Ouwa Camara (14).

Árbitros: Garvín y Balandro.

Acta digital en SWISH (NBN23)

Partido completo en FBMTV

Con los precedentes de la fase regular en la mano, la segunda semifinal prometía equilibrio y emoción. También nervios, como demostraron los dos equipos errando sus primeros ataques. Mateo Vigneault fue el primero en acertar rompiendo la defensa colegial, pero esa igualdad se mantuvo en los primeros minutos, con muchas dificultades para anotar en ambos bandos..., sobre todo en el Estudiantes. La defensa de Zentro Basket, la segunda mejor de la liga tras el Real Madrid, funcionaba a la perfección y gracias a ella los anfitriones se escaparon ligeramente. Con 11-2 a 6:17, el técnico del Estu, Manuel Gil, paró el crono. La fuerza de Sergio Fole solucionó algo las cosas, pero el canadiense Vigneault volvió a aparecer, y también el neerlandés Jayden Anike. El Zentro mantuvo su ventaja, aunque el conato de reacción colegial evitó males mayores para el Estu: 24-13 al final del primer cuarto.

El Estudiantes de Manuel Gil había aguantado el gran inicio local, pero necesitaba algo más. No solo seguir agarrado a la cuerda. Haile Aparicio rompió la barrera de los diez puntos (26-17) y dos tiros libres transformados por Dapete Carungal llevaron al 31-29, pero el Zentro Basket mantenía las distancias con una gran efectividad en ataque. Mediado el segundo cuarto, y pese a los gritos de ánimo de la afición colegial, casi nada había cambiado (34-21). Eso sí, el partido ganaba en intensidad con el paso de los minutos. Había mucho en juego y los dos equipos lo sabían. Por eso el triple de Mario Lozano (38-31) hizo saltar a la afición del Estu y también por eso el 46-36 del descanso no decidía nada.

La segunda mitad comenzó con un triple de Gabriel Fata. Más gasolina para Zentro, que, pese a los esfuerzos de su rival, seguía por encima de los diez puntos (53-40, 56-42...). La ventaja no iba mucho más allá, lo que mantenía el suspense. El triple de Mario Lorenzo la alimentó aún más y el de Pedro Stuardo dejó las cosas como estaban. El Zentro Basket no conseguía dejar atrás a un Estu que insistía e insistía, y que llegó al último cuarto con opciones (67-57). Sin embargo, el 4-0 de salida fue un varapalo para las aspiraciones del conjunto colegial. También el triple de Anike, que mandó a su equipo 16 arriba (74-68). La cuerda se estiraba a favor de un Zentro muy sólido y con muchos recursos, que aguantó la última ofensiva del Estudiantes y consiguió el doble pasaporte, a la final y al Campeonato de España.