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DAVID GONZÁLEZ / DPTO. DE COMUNICACIÓN FBM
Fotos: Rocío Benítez

JÚNIOR ESPECIAL MASCULINO

Real Madrid 80 (18+20+24+18) Adrians Andzevs (16), Gildas Giménez (15), Marcos Zurita (14), Declan Duru (6), Sidi Gueye (2) -cinco inicial- Mahamadou Landoure (8), Kyllian Michee (6), Ilia Frolov (11) y Gunars Grinvalds (2).

Movistar Estudiantes A 72 (14+17+20+21): Haile Aparicio (7), Elyjah Rebetez (21), Dominique Fisher (15), Iván Santamaría (4), Simon Gradin (10) -cinco inicial- Sergio Corrales (9), Juan Batlle (6), Daniel García, Daniel Salas, Héctor Ramallo y Jorge González.

Árbitros: Juanpe y Tolosa.

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Antes de empezar el partido se guardó un minuto de silencio en memoria del padre de un jugador del Real Madrid.

La fiesta de la Copa Ahorramas se cerraba con todo un clásico, un Real Madrid-Movistar Estudiantes que siempre promete, aunque los colegiales llegaban a la cita con ausencias importantes. Aun así plantaron cara en los primeros minutos (8-8 a 4:10) con un juego atrevido, sin dejarse impresionar por la superioridad física del Madrid. Los blancos tenían que emplearse a fondo, como hizo Marcos Zurita para deshacer el empate. El escolta encadenó seis puntos más que sirvieron para lanzar a su equipo, aunque el primer cuarto terminó con un apretado 18-14.

El Madrid tomó velocidad al comienzo del segundo con un parcial de 5-0, triple de Zurita incluido,y a 6:41 para el descanso ya estaba diez arriba (28-18), pero no era fácil cobrar más ventaja ante un Estudiantes que luchaba por cada balón con un gran trabajo de sus exteriores, Dominique Fisher, Sergio Corrales y, especialmente, el suizo Elyjah Rebetez. Por eso el partido llegó al descanso con un 38-31 que aún no decidía nada.

Las distancias, siempre por debajo de los diez puntos, apenas variaron al comienzo del tercer periodo. Y cuando se superaron esos diez puntos llegó el triple de Juan Batlle para dejar las cosas como estaban (53-43 a 2:34). A favor del Madrid estaba su dominio del rebote, especialmente con un Mahamadou Landoure que a esas alturas ya acumulaba siete capturas en el aro rival; a favor del Estu, un descaro que le permitió entrar en el último cuarto con opciones de buscar la sorpresa. Adrians Andzevs e Ilia Frolov alejaron esa posibilidad (71-55), aunque el Estu no tardó en volver a romper la frontera de los diez con un parcial de 10-0 (triple de Rebetez incluido). Con 73-67 y tres minutos por delante aún podía suceder de todo. El Madrid tuvo que pisar el acelerador para rematar el partido y llevarse la Copa.

JÚNIOR ESPECIAL FEMENINO

Movistar Estudiantes 65 (12+15+23+15): Sara Okeke (17), África Hernández (5), Adriana Díaz (18), Ada Toribio (10), Nahia Fernández -cinco inicial- Sanae Agune (2), Paulina Téllez (2), Martina Kreisler (5), Patricia Gismera y Paula Sevilla (6).

BT A 61 (11+13+20+17): Mireya Sanz (11), Carmen Sánchez-Ramos (5), Beatriz Pérez (14), Mariya Tsoneva (9), Nuria Ausaverri (9) -cinco inicial- Sonia Gómez (6), Julia Marchena (5), Ana Blanco, Adriana García, Alejandra Alonso e Isabel Yenes (2).

Árbitros: Inclán y Giráldez.

Estadísticas en SWISH (NBN23)

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Los dos mejores equipos júnior femeninos frente a frente. El talento del Estudiantes, con jugadoras como las internacionales Sara Okeke o Ada Toribio, contra un BT que nunca se rinde y que también tiene el talento por bandera (Mireya Sanz, Beatriz Pérez...). La final de Copa empezó en un pañuelo (8-8 a los cinco minutos) como fiel reflejo de la igualdad entre los dos equipos. La falta que sacó Sanae Agune valió para desnivelar la balanza a favor del Estu, aunque poco después Beatriz Pérez dejó las cosas como estaban... Ninguno de los dos equipos era capaz de hacerse con el mando y el primer cuarto se cerró con un mínimo 12-11.

Esa igualdad continuó en el segundo periodo (13-13 a 8:30)... y también las demostraciones de talento en uno y otro bando. Beatriz Pérez encontró un hueco donde no había nada y Adriana Díaz respondió con una canasta inverosímil. Mientras, Sara Okeke y Mariya Tsoneva protagonizaban un intenso duelo bajo los tableros. Okeke aprovechó un descanso de su rival para sacar cuatro puntos seguidos que pusieron al Estu seis arriba (21-15). Enseguida apareció Mireya Sanz  para recortar con un 2+1... y a 1:40 para el descanso la final volvía a apretarse (23-22). Ni siquiera el último estirón del Estudiantes le valió para irse más allá del 27-24.

La segunda mitad empezó con más equilibrio (30-30) y con más intentos de las colegiales por romper el partido. El triple de Martina Kreisler abrió un parcial de 9-0 en poco más de un minuto. Julia Marchena acertó desde lejos y, poco después, recortó a la carrera, pero el Estu había tomado ventaja y apretaba las tuercas. Con 47-36, el técnico de BT, Juan Jesús Pérez, paró el crono. Su equipo metió una marcha más y en los últimos compases del tercer cuarto ya estaba muy cerca (47-44). Aunque Ada Toribio cerró el tercer cuarto con un triple para el Estu, Sonia Gómez abrió el último con otro para el BT. El intercambio de golpes era constante, con el Estudiantes intentando escaparse y el BT evitarlo. Las torresanas no solo lo consiguieron sino que se adelantaron con el triple de Beatriz Pérez a falta de tres minutos. El Estudiantes reaccionó a tiempo y entró en el último minuto por delante, aunque la emoción duró hasta el último intento torresano.

CADETE ESPECIAL MASCULINO

Pablo Laso Academy 71 (20+14+20+16): Soumalia Salif (2), Héctor Ruiz (28), Luis Manuel Payas (8), Matija Lukic (14), Arturo Argibay (12) -cinco inicial- Kelvin Okafor (5), Eugenio Hernanz, Lino Francés, Ilhan Ngamunguela (2), Carlos Cañizares y Mamadou Bagayoko.

Zentro Basket Madrid 76 (25+11+18+22): Jorge Más (10), Carlos Álvarez (13), Lucas Troels-Smith (9), Pablo Pérez (15), Ousmane Sanogo (15) -cinco inicial- Noah Damen (5), Daniel López, Raúl Priego, Gonzalo Muro, Adrián Valbas (8), Vivien Beker (1) y Amilcar Lizarazo.

Árbitros: Zumajo y Molina.

Estadísticas en SWISH (NBN23)

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La final cadete masculina era un choque de trenes, un pulso entre dos equipos que reúnen talento y físico a partes iguales. El 8-8 a los tres minutos y medio reflejaba esa teórica igualdad, aunque Zentro Basket no tardó en tomar la delantera (parcial de 6-0) apoyado en la fuerza de Ousmane Sanogo y el acierto de Pablo Pérez. Al margen de quien caminara por delante, el partido destilaba músculo (Sanogo en un bando, Soumalia Salif en el otro), descaro y atrevimiento. Una entrada a pecho descubierto de Arturo Argibay terminó en falta y dos puntos más para la Pablo Laso Academy (13-20)... pero enseguida llegó la réplica de Zentro, triple de Lucas Troels-Smith. Y también desde la línea de tres acortó distancias el especialista Matija Lukic, aunque su último tiro del primer cuarto entró fuera de tiempo.

El segundo periodo mantuvo el mismo guion: golpe tras golpe y equilibrio en el marcador (27-27 a 7:38). Samuel Acosta, técnico de la Pablo Laso Academy, reforzó el juego interior con Okafor y Bagayoko para intentar frenar al casi imparable Sanogo. El maliense seguía haciendo daño en la pintura, aunque el segundo cuarto trajo un parón anotador en los dos equipos. Costaba mucho sumar. Por eso cuando Luis Manuel Payas hizo el 29-28, el técnico de Zentro, Andrés Rico, paró el crono. Pese a acciones tan espectaculares como el mate de Sanogo o el triple de Noah Damen, ninguno de los dos equipos consiguió romper el partido. Al descanso, 34-36.

El espectáculo fue a más al comienzo de la segunda parte con ataques rápidos y acertados, siempre dentro de un equilibrio absoluto (38-38 a 8:15, 42-42 a 7:02). De lado a lado, de costa a costa. Un tímido intento de escapada de la Pablo Laso Academy se quedó en nada con la contra culminada por Carlos Álvarez (48-48 a 4:10). Así las cosas, el tercer cuarto fue una sucesión de empates, salpicados por acciones de calidad, para llegar al último acto con 55-54. El equilibrio continuó (57-57 a 8:30, 59-59 a 6:13...), aunque con más nervios (y menos acierto) según se acercaba el final. Un triple de Álvarez (63-67) dio un ligero colchón a Zentro, que parecía decisivo con el de Pablo Pérez ya en el último minuto, aunque Héctor Ruiz aún puso unas gotas más de suspense a un duelo rocoso que destiló emoción hasta el final.

CADETE ESPECIAL FEMENINO

Fundal Alcobendas A 38 (2+14+11+11): Vera Serrano (5), Natalia Allen (2), Lucía Page, Ainara Testillano (4), Paula Illana (2) -cinco inicial- María Simarro (4), Carla Sánchez, Niobe Herguera (9), Iciar Carrero, Carmen Andrino (5), Carlota Vidal y Alma González (7).

Baloncesto Rivas Sureste A 57 (23+15+5+14): Diana López-Doriga (3), Irene Pineda, África Lázaro (9), Julia Izquierdo (11), Marta Gonzalo (11) -cinco inicial- Paula Gutiérrez (2), Laura Alonso, Jimena Moreno (10), Celia López-Doriga (5), Alba Sanchez y Carla Solano (6).

Árbitros: Ortín y Valvolsem.

Estadísticas en SWISH (NBN23)

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El Baloncesto Rivas arrancó de la mejor posible, con un parcial de 0-6, triple de Marta Gonzalo incluido. Fue el aviso de lo que vendría después. Junto al acierto en ataque, las ripenses presentaban una seria defensa que complicaba los movimientos de las jugadoras del Alcobendas. Los primeros puntos de las alcobendenses llegaron desde la línea de tiros libres (Ainara Testillano), pero solo fue un paréntesis. Con 2-12 el técnico del Alcobendas, Alberto Andrés, paró el crono. Había que frenar a un Rivas lanzado, pero era misión imposible. Al final del primer cuarto, el marcador estaba en 2-23 con Marta Gonzalo (9 puntos) liderando el vendaval ripense.

El Alcobendas despertó en el segundo cuarto con diez puntos en cinco minutos, pero ya estaba muy lejos en el marcador,  y su rival no cedía. A 4:37, tras el triple de Celia López-Doriga, Rivas mandaba por 12-32. El Alcobendas tiraba de orgullo, pero era muy difícil remontarle a un Rivas en estado de gracia, que llegó al descanso con 16-38.

Al Alcobendas no le quedaba otra que cerrar líneas en defensa, obligando a su rival a intentos forzados. Sin embargo, en el otro extremo de la cancha la defensa ripense también funcionaba, frenando cada intento. El tercer parcial fue para el Alcobendas (11-5), pero apenas cambió nada en un partido que llegó al último periodo con 27-43. Por si quedaba alguna duda, el último periodo se abrió con un triple de Carla Solano. El Baloncesto Rivas Sureste caminaba con paso firme hacia la Copa Ahorramas. La mejor prueba fue el triple de Jimena Moreno (31-49), undécimo de su equipo, que frenó los últimos intentos de un Alcobendas que, a pesar de la distancia en el marcador, peleó hasta el final para marcharse de Torrejón con el trofeo de subcampeón y la cabeza alta.

INFANTIL ESPECIAL MASCULINO

CB Las Rozas A 74 (19+21+17+17): Miguel Arribas (7), Xabier Ozaeta, Carlo Polini (7), Miguel Riesco (12), Álvaro Hernández (17) -cinco inicial- Carlos Montes, Nicolás Gómez, Nicolás Sierra (4), Tiago Fole (10), Mateo Pérez (6 y Xavi Martín (11).

Movistar Estudiantes A 61 (15+19+17+10): José Luis Benítez (7), Daniel García (4), Diego Miñón (8), Antonio Caba (2), Guillermo Espinosa (2) -cinco inicial- Nicolás Pelegrín (4), Jacobo Docando (2), Jorge Rey (14), Mario Caballero, Jorge Cañeque (3), Guillermo Martínez (9) y Lucas Pérez (6).

Árbitros: Javier y Adasu.

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La gran final masculina comenzó con el CB Las Rozas un paso por delante (5-2). Solo un paso porque el partido aparecía como un duelo imprevisible entre dos equipos igual de atrevidos. Mediado el primer cuarto, tras el triple de Guillermo Martínez, el marcador estaba en 8-7. Miguel Riesco y Miguel Arribas alejaron a los roceños, pero por poco tiempo... El empate a 12 a falta de cuatro minutos reflejaba perfectamente la igualdad de un choque de ida y vuelta, sin dueño, que cerró el primer cuarto con 19-15.

El argumento se mantuvo sin apenas variaciones en el segundo acto. El CB Las Rozas mantenía una ligera ventaja (24-21 a 7:20) para nada decisiva en un partido de este corte. Álvaro Hernández la alargó y Daniel García volvió a recortarla. El equilibrio fue a más con el paso de los minutos, con mínimas diferencias para unos y otros (29-30, 32-30...) y con reparto de cifras en ambos equipos. El triple de Álvaro Hernández aumentó la ventaja del CB Las Rozas (37-30) y provocó el tiempo muerto de Pablo Durán, técnico del Estudiantes. Un rebote ofensivo de Lucas Pérez solucionó algo las cosas, pero no evitó el 40-34 del descanso.

Esa ligera ventaja roceña continuó en la segunda mitad. El CB Las Rozas caminaba por delante, pero no conseguía romper el partido ante un Estu que se mantenía a un paso (45-43 a 5:48) apoyado en el trabajo colectivo y, bajo los aros, en la capacidad reboteadora de Lucas Pérez. El partido llegó al último cuarto con 57-51 y todo en el aire... La emoción aumentaba por segundos y el triple de Jorge Rey (63-61 a 2:40) encendió las gradas del José Antonio Paraíso. Los dos equipos querían la Copa y se lanzaron a buscarla en un final de partido vertiginoso. Una vez más, el CB Las Rozas aguantó el tirón, esta vez con dos triples de Riesco. El primero dio la ventaja decisiva y el segundo remató el partido.

INFANTIL ESPECIAL FEMENINO

BT A 77 (10+21+27+19): Julia Niebla (14), Vera Blázquez (9), Alba Castellanos (8), Aitana Vendrell (11), Alejandra Sanz (4) -cinco inicial- Gabriela Martínez (2), Martina Fernández (3), Martina Vendrell (3), Livia Casado (5) y Alexandra Louw (18).

Fundal Alcobendas A 67 (21+17+14+15): Matilde Zurita (4), Lourdes Martín (15), Cristina Pombo (4), Gabriela Vallejo (6), Nerea Testillano (6) -cinco inicial- Sandra Santa Cruz (2), Andrea Antón (13), Carla Gutiérrez (3), Jimena García, Elena Merino (7), Elena Alonso (3) y María del Olmo (4).

Árbitros: Adrados y Ortas.

Estadísticas en SWISH (NBN23)

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En el primer partido de la larga jornada de finales, el BT empezó mejor (5-2), pero se encontró con la reacción de un Alcobendas que encadenó un parcial de 9-0, con Gabriela Vallejo como principal arma ofensiva, para tomar el mando del encuentro en el primer cuarto. A base de robos y llegadas en velocidad, las alcobendenses se pusieron en 8-17 a 2:20. El BT disponía de menos opciones en ataque, pero en un partido infantil, y nada más empezar, todo podía suceder. El 10-21 del primer cuarto no decidía nada.

Sobre todo porque el segundo periodo empezó con tres puntos del BT. Las jugadoras de Juan Jesús Pérez querían meterse en el partido, pero enfrente tenían a un Alcobendas muy efectivo, superior en el golpe a golpe, y que repartía cifras (a esas alturas nueve jugadoras ya habían anotado). Un juego coral que servía para mantener las distancias e incluirlo ampliarlas ligeramente (13-27 a 6:08). El BT no se rendía y su esfuerzo dio frutos con un parcial de 7-0 que provocó el tiempo muerto de Pablo Gutiérrez. Fue el primer aviso. La reacción se alargó hasta un 11-0 (de 20-33 a 31-33) que confirmó el despertar torresano, aunque la primera mitad se cerró con un triple sobre la bocina de Lourdes Martín.

La final había ido de menos a más, y la emoción creció con el 9-0 de salida a favor del BT, que se puso por delante. Ahora los dos equipos jugaban a lo mismo, a volar hacia el aro lo antes posible. Por eso el marcador oscilaba hacia uno y otro lado, punto arriba punto abajo. Solo en los últimos minutos del tercer cuarto el BT logró una ligera renta (50-43, 52-46...), pero en un partido de este corte, a rienda suelta, eso tampoco quería decir nada. Con 62-52, ya en el último cuarto, la final seguía en el aire porque el Alcobendas insistía e insistía... Solo el oportuno triple de Vera Blázquez (71-62 a 3:01) dio al BT cierta tranquilidad y, minutos después, la Copa Ahorramas.