El Tuenti Móvil Estudiantes junior despejó en el histórico parqué de la calle Pez Volador todas las dudas que había ofrecido en los primeros compases de la temporada. En un encuentro marcado por la intensidad y los nervios, las colegiales vencieron al Mac Place Real Canoe (hasta ahora líder del Grupo B) por 53-71. Un margen que se abrió en el último cuarto después de que el encuentro comenzara con dominio local y se diera la vuelta en el segundo periodo pero siempre con mínimas diferencias. Tras el resultado del clásico, el Grupo B queda con el Plenilunio D.O. como único invicto, seguido por Estudiantes y Canoe.

Mac Place Real Canoe 53 (18+10+12+13): Nuria Román, Raquel García, Patricia Martínez, Alejandra Lasheras, Laura Requena -cinco inicial- Lucía Arroyo, Lucía Rodríguez, Sara Hereda, Victoria Alzina, María Iglesias, Paula Rubio y Marta Sánchez.

Tuenti Móvil Estudiantes 71 (13+21+10+27): María Conejero, Raquel Santolaya, Carmen Llul, María Domínguez, Lourdes Jiménez -cinco inicial- Elena Santabárbara, Patricia Carretero, Lucía Gutiérrez, María Conde, Adriana Pedrayes, Silvia Ruiz e Irene San Andrés.

Árbitros: Ismael y Becerril

En la tercera jornada de liga, llegaba el primer enfrentamiento entre dos de los favoritos. Aunque el primero en la pole parece el Rivas Ecópolis de José Ignacio Hernández (líder del Grupo A), para el Mac Place Real Canoe y el Tuenti Móvil Estudiantes llegar a la fase final siempre es una obligación y el primer choque de la temporada, en la calle Pez Volador, se presentaba con un exigente test. Eso sí, ambos tenían ausencias, jugadoras que estaban en el banquillo pero no actuaron: las lesionadas Lucía Rodríguez y Marta Sánchez en el Canoe, y María Conde en el Estudiantes.

Raquel García frente a tres defensoras del Tuenti Móvil Estudiantes.

El 4-0 de salida, a base de velocidad, provocó el primer tiempo en el banquillo colegial cuando apenas había pasado minuto y medio desde el comienzo. Con dos reglas básicas, defensa y contrataque, las locales llevaban la iniciativa. María Conejero trataba de poner orden en el ataque del Estu, pero el Canoe abría hueco (8-2, 10-4...) gracias a la electricidad de Raquel García y Nuria Román. Dos triples, de Alejandra Lasheras y Raquel García, lanzaron a las locales hasta el 16-8 a dos minutos para el final del primer cuarto. El Estudiantes había ganado en solidez y reaccionó con un parcial de 0-5 (triple de Conejero incluido) por lo que al final del primer cuarto, la ventaja local era muy ligera: 18-13.

Los dos equipos comenzaron el segundo periodo más directos, con ataques más cortos, un estilo en teoría más favorable al Canoe, pero enseguida se vio que el Estu había mejorado y no dejaba anotar con tanta facilidad como al principio. Mucho más firmes en defensa y con paciencia para buscar la mejor opción en ataque, las colegiales estrecharon el marcador (22-20 a 6:35) provocando que Pablo Roldán detuviera el crono. No sirvió para mucho. La mejoría del Estu se evidenció en el empate a 22, en acciones como un triple de la cadete Lucía Gutiérrez y en el 28-34 del descanso tras otro triple, sobre la bocina, de María Domínguez.

María Domínguez intenta avanzar hacia el aro del Real Canoe.

El tercer periodo comenzó igual que el segundo, con el demoledor acierto del Estudiantes en el tiro exterior, un parcial de 0-5 que llevó el marcador a +11 (28-39). Las visitantes parecían tener el partido controlado, sobre todo porque al Canoe le costaba un mundo acertar con la canasta contraria. La baja momentánea de Lasheras fue un obstáculo añadido para las canoístas, que, eso sí, igualaron el parcial en un encuentro cada vez más enrededado y con escasos puntos (el parcial en 5 minutos era de 5-5). Los nervios mandaban en los dos equipos. El Canoe sufrió otra baja (esta definitiva), la de María Iglesias, con un golpe en la rodilla, pero eso no hizo que se descolgara en el marcador y Raquel García firmó, de tres, el 40-44 con que se cerró el tercer periodo. No era un gran partido, pero la emoción se mantenía. También la ventaja del Estudiantes. Elena Santabárbara y Adriana Pedrayes se quedaron solas para llevar a su equipo hasta 40-48. El Canoe estaba obligado a reaccionar y lo hizo con un parcial de 5-0, que cortó Conejero de tres. En el momento decisivo, el acierto correspondió al Estudiantes. Mientras a las locales la canasta se les hacía cada vez más pequeña, las colegiales culminaban cada ataque. De tres, a la contra, en estático... Un bombardeo que provocó que, en apenas cuatro minutos la ventaja se fue hasta +21 (47-68). Un demoledor parcial de 2-20 que decidió el primer clásico.

Patricia Martínez y Carmen Llul luchan por un rebote bajo el aro del Estudiantes.