Llegaba el Real Madrid junior a Torrelodones invicto y con unas cifras mareantes (más de cien puntos anotados por partido en los 14 anteriores), pero se encontró con un HM Hospitales Torrelodones que demostró por qué tampoco conocía la derrota hasta el domingo. Bajo un ambiente espectacular, con el pabellón lleno hasta la bandera, el actual campeón de España se impuso por 53-65 después de un encuentro que permaneció nivelado hasta el minuto 25 (40-40). Con más capacidad de rotación y acierto desde lejos (8 triples), los blancos cobraron una ligera ventaja en la segunda mitad del tercer cuarto, que defendieron en el último.
HM Hospitales Torrelodones 53 (18+10+14+11): Jorge Lozano, Emil Savic, Pablo Poyatos, Andrew Ramírez, Jordan Djounorou -cinco inicial- Javier Suárez, Mateo Marginet, Javier Lozano, Ibon Miralles, Javier Pérez, Serge Mourtala y Pablo Domínguez.
Real Madrid 65 (26+7+23+9): Santiago Yusta, Domagoj Proleta, Andrés Rico, Guillermo Mulero, Emanuel Cate -cinco inicial- Miki Fons, Daniel de la Rúa, Ignacio Ballespín, Samba Thiago, Dino Radoncic, Felipe dos Anjos y Luka Doncic.
Árbitros: Carretero y López.
El Real Madrid se presentó en el duelo de invictos sin Jonathan Barreiro y con Luka Doncic inscrito pero vestido de largo. A cambio, entraba el cadete Dino Radoncic, reciente subcampeón de España de selecciones autonómicas. Un cambio que podía mermar el potencial del poderoso junior blanco, pero no su condición de favorito. Eso sí, enfrente estaba el otro equipo con pleno de victorias (14), sin nada que perder, en un pabellón lleno hasta la bandera y con ambiente de fase final.
Jordan Djouronou brindó dos mates; este fue el primero.
Un triple del exmadridista Pablo Poyatos abrió el marcador para los locales, que, espoleados por su público, mandaban por 7-2 al minuto y medio de juego. El HM Hospitales Torrelodones estaba dispuesto a rebelarse con un baloncesto tan directo como efectivo. Mediado el primer cuarto seguía la ventaja local (12-9), aunque, poco a poco, el Madrid empezaba a meterse en el partido como demostró el empate a 11 de Santi Yusta. El partido avanzaba muy rápido, con una sucesión de canastas en uno y otro lado. El triple de Jorge Lozano (16-13) volvió a levantar al banquillo local. Sin embargo, poco después, llegó el de Domagoj Proleta, que puso por delante al Madrid (16-19) y cambió el signo del encuentro. A la vez que Paco Redondo desplegaba su fondo de armario (Felipe dos Anjos, Samba, De la Rúa...), su equipo amplió la ventaja hasta el 18-26 con que acabó el primer cuarto.
Pese a esa desventaja y al acierto de los blancos desde larga distancia, el HM Hospitales Torrelodones lo siguió intentando en el segundo periodo. A 6:31 para el descanso se mantenían los ocho puntos de diferencia (23-31) con los torresanos aguantando bien en defensa. En ataque costaba más, porque Jordan Djonourou o Serge Mourtala se estrellaban contra Felipe dos Anjos, pero Djounorou acertó a palmear una fulgurante contra de Emil Savic (25-31 a 3:39) y eso le hizo crecerse. Después llegaron dos tapones y un mate que enardecieron el pabellón y confirmaron que el HM Hospitales Torrelodones plantaba cara al Madrid. Así lo ratificó el 28-33 del descanso tras un raquítico parcial de 10-7.
En el segundo continuó el intercambio de golpes, de costa a costa y a toda velocidad. El primero fue Emanuel Cate; después Andy Ramírez, volando entre los pívot blancos. Ese valor para estrellarse contra el muro pasara lo que pasara era la principal arma de los torresanos. Ramírez lo hizo y Djonorou recogió el balón en el aire para matar el 34-35 a 7:12. El Madrid intentaba hacer su juego y, sobre todo, mantenía un buen porcentaje de acierto (triple de Andrés Rico, 34-40), pero el HM Hospitales Torrelodones respondía igual. Por eso, tras dos triples seguidos de Ramírez, el marcador estaba en empate a 40, unas tablas que rompió Guillermo Mulero también desde más allá de 6,25. En los últimos minutos del tercer periodo, el Madrid encontró el equilibrio interior con la pareja Samba-Cate; Mulero y Yusta acompañaron a la perfección por fuera, y todo ello lo aprovechó para escaparse con un parcial de 2-16 hasta un +14 (42-56) que ponía el partido ya muy cuesta arriba para los locales.
En el último, al Madrid la bastó con cerrar la pintura (ahora con Felipe dos Anjos junto a Samba) para obligar a los torresanos a intentar lo imposible o recurrir a los triples. Con Jordan Djounorou y Andy Ramirez multiplicándose, al menos los locales consiguieron que el margen no fuera más allá (49-58, 51-60...) y, sobre todo, dieron la sensación de que al Madrid de los récords se le puede competir de tú a tú... O, al menos, no hay que tratarle siempre de usted.
Santiago Yusta enfila el camino al aro del HM Hospitales Torrelodones.