Seis victorias, la última ante el HM Torrelodones por 90-52, y ya dos de ventaja sobre el segundo clasificado. El Tajamar no solo se mantiene como el único equipo invicto de Primera Nacional masculina sino que además lo hace despejando dudas cada semana. La última prueba llegó frente a los torresanos en un encuentro que se mantuvo igualado en el primer cuarto (26-24), pero se rompió en el segundo con un parcial de 20-7. El acierto de Ignacio Alonso (20 puntos, nueve seguidos en ese segundo periodo), el oficio de Enrique Macías, los recursos dentro y fuera de la pintura... Con una plantilla amplia y cargada de moral, este Tajamar va en serio.

Tajamar 90 (26+20+21+23): David Díaz, Joaquín Concejal, Roberto Garrido, Ignacio Alonso, Enrique Macías -cinco inicial- Miguel Coello, Alberto López, Ricardo Moreno, Rafael Alonso, Diego Sánchez, Alejandro Ávila y David Casillas.

HM Torrelodones 52 (24+7+15+4): Adrián Barrondo, Pablo Poyatos, Ernesto Tapia, Diego Gil, Javier Hernán -cinco inicial- Karl Jesper Lindberg, Goran Bagaric, Rubén García, Luis Choque y Javier Suárez.

Árbitros: Palacio y Bárez

Con un pleno de victorias en las cinco primeras jornadas (algunas ante rivales tan duros como el Xperia Zentro SANJORGE o el Majadahonda), el Tajamar recibía a un HM Torrelodones al alza después de encadenar sus dos primeros triunfos. Tras la derrota el sábado del Coslada Plural Asesores ante La Paz, si los vallecanos ganaban lograban dos victorias de ventaja sobre sus perseguidores, y salieron dispuestos a hacerlo con dos puntos de Joaquín Concejal nada más empezar. Pero el HM Torrelodones mostró enseguida sus armas: fuerte defensa y  salidas en velocidad. Así, a los dos minutos y medio, los visitantes marchaban por delante (5-9) y el encuentro mostraba signos de equilibrio.

Pese a su mayor experiencia y oficio, al Tajamar le costaba sacar partido de los ataques estáticos, mientras su rival se mostraba mucho más directo cara al aro. Unas veces con suerte y otras sin ella, pero siempre con atrevimiento y descaro. El 11-11 a 6:12 reflejaba esa igualdad. Pablo Poyatos intentó romperla desde fuera, pero Enrique Macías volvió a apretar el marcador bajo el aro. Pese a que estaba en sus inicios, el partido crecía en intensidad. Miguel Coello intentó poner una marcha más en el Tajamar, pero dos acciones consecutivas de Diego Gil llevaron al HM Torrelodones cinco arriba: 17-22. Ahí llegó el momento de Ignacio Alonso, que asumió la responsabilidad en los locales y sus nueve puntos consecutivos (un triple incluido) llevaron el marcador al 26-24 del primer cuarto.

El HM Torrelodones igualó el partido nada más salir del banco, pero pronto se vio que los locales estaban más firmes hasta el punto de, con 30-26, provocar el tiempo muerto de Pablo Gómez. Ignacio Alonso seguía desatado y con otro triple, el tercero de su cuenta, llevó a su equipo hasta la máxima diferencia hasta ese momento (33-26), al mismo tiempo que provocaba las primeras dudas en los torresanos. Faltaba la chispa del principio y los intentos desde fuera, como el los Rubén García o Ernesto Tapia, no entraban. El Tajamar lo aprovechó para marcharse hasta 38-28 a 5:10 para el descanso. Pese a que los torresanos intentaron acercarse más al aro, una extraordinaria defensa y una gran efectividad en ataque le sirvieron al Tajamar para llegar al descanso con +15 (46-31) tras un parcial de 20-7.

Diego Gil intenta escaparse de Roberto Garrido.

Tras el descanso, los visitantes recuperaron la puntería desde larga distancia, lo que hizo que el encuentro se mantuviera vivo durante unos minutos. Tres triples de Javier Hernán (dos de ellos consecutivos) llevaron a su equipo a la frontera de los diez (53-42), obligando al Tajamar a recuperar la concentración en defensa. En ataque también costaba más que en el segundo cuarto, pero la contra entre Ignacio Alonso  y David Díaz dio como resultado un 2+1 especialmente valioso para mantener las diferencias, y el triple desde la esquina de Enrique Macías, el 61-42, resolvió la crisis. Los vallecanos llegaron a +22 (66-44) y cerraron el tercer periodo con un +19 (67-48) que ponía el partido de cara. El último cuarto confirmó su autoridad. El HM Torrelodones acusó su escasez de efectivos (no jugaron ni los lesionados Pablo Domínguez y Karl Lindberg ni Goran Bagaric), se desfondaron y no pudieron aguantar el ritmo  de un Tajamar a pleno rendimiento, que se marchó cada vez más lejos en el marcador, lo hace también en la clasificación y ya empieza a asustar.

Miguel Coello sube el balón bajo la mirada de Javier Hernán.