Con una sólida defensa durante todo el partido y una capacidad de reacción en el último cuarto, ante la remontada de su rival, el Real Canoe cadete se impuso al Fuenlabrada por 70-62 y se queda como sorprendente líder solitario del Grupo 2, por delante de Fuenla (al que le gana el average), Movistar Estudiantes y HM Torrelodones. Los amarillos marcharon por delante durante casi todo el partido, pero con diferencias muy ajustadas (17-15, 22-12...) Solo al final del tercer periodo se marcharon hasta +10 (50-40). Ahí llegó el intento de remontada del Fuenla a golpe de triple y la confirmación de que, además de defender, el Canoe sabe aguantar la presión.
Real Canoe 70 (17+10+23+20): Jorge Navalpotro, Alejandro Álvarez, Juan José Jiménez, Joaquín Borque, Diego Vázquez -cinco inicial- Diego Mata, Alejandro Catelli, Izan Gómez, Pablo Díaz, Gabriel Gil, Gabriel Segovia y David Rodríguez.
Fuenlabrada A 62 (15+15+10+22): Juan José Santana, Alexis Sánchez, Álvaro Jiménez, Diego Pulido, Carlos Bécker -cinco inicial- Hulunayehu Caballero, Saúl Meras, Alberto Muro, Iñaki Echeverría y Jorge Aragón.
Árbitros: Jano y Becerril.
El Fuenlabrada comenzó asustando, con un triple de Alexis Sánchez nada más empezar, pero los locales reaccionaron enseguida y dieron la vuelta al marcador (4-3) gracias a una contra de Joaquín Borque. La igualdad del partido, patente desde el principio, se reflejaba en la lucha bajo los aros, con peleas por cada balón (sobre todo entre Diego Vázquez y Juan José Santana) y en los intentos por anotar, entre un mar de brazos. Era un duelo entre dos equipos igual de intensos, dispuestos a asumir riesgos, como mandar balones al interior de la pintura pasara lo que pasara. O el triple de Alejandro Álvarez, mediado el primer cuarto, que permitió al Canoe cobrar una ventaja (12-7), pronto enjuagada por su rival. El parcial de 17-15 reflejó la ligera, ligerísima, superioridad del Canoe en el primer periodo.
Diego Mata avanza con el balón en un ataque canoísta en la primera mitad.
La clave estaba cara al aro, donde el Fuenlabrada tenía más problemas. En el comienzo del segundo cuarto esas dificultades parecieron extenderse a los dos equipos. Hasta que Gabriel Gil rompió la norma al elevarse para hacer el 19-15 y, poco después, Alejandro Catelli aumentó la ventaja desde los tiros libres. El Canoe mantenía la iniciativa en el marcador apoyado en una firme defensa. La contra de Diego Mata (22-15) encendió las primeras luces rojas en el banquillo fuenlabreño. Había que reaccionar sí o sí, y los visitantes lo hicieron con un 0-4 que volvió a estrechar el cero. El 27-27 a 3:02 para el descanso (triple de Alberto Muro) confirmó el crecimiento sobre la pista del Fuenla. Y otro triple, este de Diego Pulido, permitió a los visitantes irse al descanso con ventaja.
Pero el partido era un pulso aún sin dueño, como demostró el Canoe al voltear el marcador nada más comenzar el tercer periodo con un parcial de 7-0 en minuto y medio. La defensa, aún más adelantada y agresiva, volvía a ser su mejor arma. El parcial de salida llegó a 9-0 antes de que Carlos Bécker rompiera la sequía con un triple marca de la casa. Los visitantes tenían muchas dificultades para anotar, se veían obligados a intentarlo desde lejos o en posiciones muy forzadas, pero les quedaba su acierto desde lejos, y de ahí el ajustado 38-35 a 6:34. El Canoe tampoco encontraba el camino para escaparse y el encuentro mantenía la misma tónica de la primera parte, con diferencias mínimas. Pero, poco a poco, casi con cuentagotas, los locales se marcharon hasta +7 (42-35, 45-38...) y cuando Juan José Jiménez elevó la ventaja a +10 (48-38) todo su banquillo saltó como un resorte. En su mejor momento del partido, el Canoe llegó a ponerse con +12, y cerró el tercer periodo con 50-40.
En el último cuarto, los locales comenzaron (quizá demasiado pronro) a gestionar el tiempo, con ataques largos y la misma defensa que seguía provocando problemas en el Fuenla. La tensión aumentó, y las diferencias comenzaron a bajar cuando los visitantes acertaron desde fuera, como en el triple de Bécker (52-43 a 7:08) o el de Iñaki Echeverría (52-47 a 5:47)... Al bombardeo se unió el balón rebañado bajo el aro por Juan José Santana, que apretó el marcador al máximo: 55-52. A golpe de triple, el Fuenlabrada llegó a ponerse por delante (57-58) y dio paso a un desenlace vibrante, de nuevo con balones peleados hasta el límite, en el que los locales demostraron que además de defender saben aguantar la presión, buscar el aro contrario y ganar rebotes decisivos. Quizá por eso mandan en el Grupo 2, por delante de los favoritos, Estudiantes y Fuenlabrada.