Uros de Rivas 61 (17+24+12+8): Alonso Roldán (5), Luis Gustavo Matos (9), Sergio Paradela (3), Carlos Vila (14), Pedro Tomico (5) -cinco inicial- Pablo Vila (6), Sergio Coronado (2), Alejandro Real (7), Jorge Barrado (1), Pablo Iglesias (7) y Diego Escot (2).

Majadahonda 75 (18+16+19+22): Jorge Izaguirre (4), Jorge Cuesta (20), Daniel Herreros (26), Joaquín Borque (6), Miguel González (10) -cinco inicial- Alejandro Serrano, Julián Ricoy (3), Sebastián Cuéllar (3), Íñigo Velázquez, Fernando Rivero, Marcos Torregrosa (1) y Daniel Arranz (2).

Árbitros: Adrados y Barba.

MVP VIPS del partido: Jorge Cuesta (Majadahonda). 20 puntos, 5 rebotes y 27 de valoración.

Estadísticas en SWISH (NBN23)

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DAVID GONZÁLEZ / DPTO. DE COMUNICACIÓN FBM
Fotos: Rocío Benítez

Uros de Rivas y Majadahonda llegaban al Partido VIPS en el balcón de los playoffs, la zona más caliente del grupo Par, con nueve victorias cada uno. En un grupo tan igualado, ganar era vital. Los locales no tenían a su jugador más determinante, Ángel Gómez, lesionado, pero empezaron mejor (8-4 a 5:32) gracias a su mayor atrevimiento (triple de Luis Gustavo Matos) en ataque. El Majadahonda no se sentía cómodo ante un rival muy intenso y directo, que si no sacaba los puntos al menos sí la falta. Pero los visitantes no tardaron en mejorar desde la defensa, estrechando las líneas. La remontada llegó de atrás hacia adelante y culminó con el triple de Miguel González, el empate a 13. El estirón majariego se prolongó aún más (13-17 a 2:03). En el momento más oportuno, Pablo Iglesias encontró dos huecos para empatar, aunque Sebas Cuéllar sacó la falta para que su equipo cerrara el primer cuarto un punto arriba.

El segundo comenzó con un intercambio de golpes y mínimo margen en el marcador (21-20 a 8:30). Los dos equipos buscaban el aro con ataques rápidos, directos... y casi siempre acertados. Carlos Vila alargó la ventaja local (23-20 a 7:57), aunque fue el espectacular mate a una mano de Diego Escot (28-24 a 5:55) el que levantó al público de Los Almendros. Los locales llegaron a disponer de seis puntos de ventaja. El triple del siempre oportuno Daniel Herreros frenó el intento de escapada y, poco después, Luis Matos devolvió la moneda y el +6 (33-27 a 3:56). A dos minutos para el descanso, el marcador estaba en un apretado 36-34 tras el acierto de Jorge Cuesta bajo el aro. Sin embargo, el arreón local (tercer triple de Matos incluido) lo llevó hasta 41-34, la máxima ventaja hasta ese momento.

La distancia que creció nada más empezar la segunda mitad por medio de Carlos Vila. El Majadahonda tenia que reaccionar para no quedarse atrás, y lo hizo con el 2+1 de Miguel González, pero los locales mantenía un alto índice de efectividad que sirvió para alargar la brecha. En tres minutos ya estaban en +12 (49-37), obligando a su rival a meter una marcha más. Más prisas pero también más precipitación. La distancia no solo no se recortó sino que se alargó con el 52-38 de Pedro Tomico. ¿Partido encarrilado? Para nada. Cuando más falta hacía, los majariegos despertaron con un parcial de 10-0 que devolvió la emoción... y el 2+1 de Herreros provocó que se llegara al último cuarto en tablas: 53-53.

El pulso se reducía a diez minutos llenos de emoción. El Majadahonda tenía a su favor un punto más de experiencia, muy importante en los momentos decisivos. Una combinación entre Herreros y Daniel Arranz supuso el 57-61. Los majariegos se fueron seis arriba antes de que  Carlos Vila estrechara el marcador. El partido parecía destinado a un final apretado, como el grupo, como la Liga VIPS... Los visitantes tiraban de oficio, de serenar el juego hasta encontrar el momento clave. El triple del MVP Jorge Cuesta (59-66) fue uno de ellos; el del capitán Herreros a la media vuelta (59-73) el decisivo.