Federación de Baloncesto de Madrid

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EN JUEGO - FBM - Senior

Majadahonda suma desde la defensa



Defensa, experiencia, saber hacer... y, como consecuencia, un último parcial de 7-24 que inclinó el partido. El Majadahonda, un clásico de Primera Nacional (dos fases finales en los últimos cuatro años), superó la complicada visita al Uros de Rivas por 63-78 después de aguantar por detrás durante los tres primeros cuartos y rematar en el último apoyado en su defensa. Los dos equipos se quedan con dos victorias, en el pelotón de perseguidores de los invictos líderes del grupo Par, Villalba Gilmar y Zentro Basket Madrid.


Uros de Rivas 63 (16+22+18
+7): Víctor Fernández, Adrián Pérez, Jorge Sánchez, Jesús Navarro, Pedro Bueno -cinco inicial- Alberto Sánchez, Georgi Mitrovsky, Agustín Camacho, Pablo Ferritto, Héctor Figueroa, Daniel Soria y Alberto del Hierro.

Majadahonda 78 (16+17+21+24): Javier Azofra, Pablo Poyatos, Antonio Guerrero, Jorge Izaguirre, Javier Mérida -cinco inicial- Juan David Zúñiga, Daniel Herreros, Aitor Amores, Alejandro Herreros, Daniel Arranz, Borja de la Sen y Pablo Muñoz.

Árbitros: Sabatel y Barderas.

Estadísticas

El choque de Los Almendros partía como un encuentro igualado en una liga que pinta igual, al menos en las primeras jornadas. El triple inicial del Uros, de Jorge Sánchez, puso en ventaja a los locales, pero sus siguientes intentos, también desde lejos, no entraron. La defensa del Majadahonda se hizo fuerte enseguida, Javier Mérida remó hasta acortar distancias en la zona y Jorge Izaguirre dio la vuelta al marcador también bajo el aro. El parcial visitante llegó a 0-6 en un partido más táctico y estático que explosivo y rápido. Un  2+1 de Jesús Navarro devolvió la igualdad prevista, que se reflejó en el 7-7 mediado el primer cuarto. Ese equilibrio casi absoluto (16-16 al descanso) se mantuvo en un primer periodo que tuvo un susto, la retirada de Héctor Figueroa con problemas en un tobillo.

Sin embargo, Figueroa volvió nada más empezar un segundo periodo que mantuvo la misma dinámica, con dificultades para anotar en los dos equipos. Era un pulso entre dos conjuntos similares, fuertes por dentro e intensos por fuera. Un triple de Alberto Sánchez dio ventaja a los ripenses; el Majadahonda intentó responder igual, pero tres intentos seguidos desde lejos no quisieron entrar. Sí lo hizo el de Borja de la Sen bajo el aro cuando ya habían pasado más de dos minutos. Y es que anotar costaba un mundo. Hacían falta chispazos como el de Figueroa (22-18) o el de Jorge Sánchez, que llevó al Uros de Rivas seis arriba. La escalada local continuó hasta +8 (26-18) y +9 (32-23)... aunque la reacción visitante fue fulminante y a 30 segundos para el descanso el marcador registraba un apretado 34-33. Dos tiros libres transformados por Adrián Pérez y otros dos por Figueroa llevaron al 38-33 del descanso.

La segunda mitad empezó como la primera, con un triple, pero este a cargo de Álex Herreros para el Majadahonda. Adrián Pérez mantuvo las distancias con el 40-36 y Daniel Herreros las estrechó al máximo también desde lejos. El juego era más rápido y, sobre todo, más directo, con los dos equipos mirando el aro cuanto antes. El Uros de Rivas aguantó el órdago y se escapó hasta 47-39 con dos rápidas transiciones, pero los muros defensivos se habían roto y el movimiento del marcador era constante. Como muestra, otro triple de Álex Herreros (49-47) o la asistencia de su hermano Daniel a Jaime Azofra (51-49). Esas minimas diferencias a favor del Uros se mantuvieron durante todo el tercer cuarto, que terminó con un apretado 56-54.

Álex Herreros
empató a 56-56 al poco de empezar el último cuarto, ratificando así la igualdad del partido, y cuando Azofra dio ventaja al Majadahonda, el técnico local, Ricardo Mengíbar, paró el crono. Veía venir lo que sucedió despues. El momento de la verdad llegaba con un Majadahonda muy firme en defensa y vertical en ataque, como demostró Antonio Guerrero provocando el 2+1 (aunque el adicional no entró). Robo tras robo, los majariegos no solo frenaban a su rival sino que tenían opciones de abrir una brecha que se puso en +7 (56-63) con poco más de seis minutos por delante. Los ripenses intentaron reaccionar de la forma más rápida, con triples y contrataques, y apretaron de nuevo el partido (61-63 a 5:42), pero el Majadahonda aguantó sin inmutarse y el triple de Pablo Poyatos llevó al 61-69 a falta de 4:22. Dos minutos después, con 61-73, el partido ya estaba en manos de un Majadahonda que incluso alargó ese parcial hasta 0-12. Cuestión de oficio.

Galería
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