Federación de Baloncesto de Madrid

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"Mis años en la FBM fueron extraordinarios"



Su último destino laboral ha sido Bolivia, acaba de pasar unos días de descanso en Polonia y en el momento de publicar esta entrevista está volando hacia Pyongyang, capital de Corea del Norte, donde pasará al menos un mes trabajando con las seleccion...

EntrevistaRicardoGonzalez1Su último destino laboral ha sido Bolivia, acaba de pasar unos días de descanso en Polonia y en el momento de publicar esta entrevista está volando hacia Pyongyang, capital de Corea del Norte, donde pasará al menos un mes trabajando con las selecciones de ese país. Ricardo González Dávila (Madrid, 26 de mayo de 1972) se ha convertido por méritos propios en el trotamundos del baloncesto español, pero sus primeros pasos los dio en las canchas de la Comunidad de Madrid, en concreto en el colegio Agustiniano. Fue seleccionador de la FBM durante una década antes de dar el salto a las competiciones FEB y de ahí... a dar la vuelta al mundo.



 

 

¿Cómo surgió la oportunidad de marcharte a Corea del Norte?

Me escribió el Comité Olímpico de Corea del Norte ofreciéndome la posibilidad de ir y desde el principio les dije que sí. La verdad es que me apetece mucho la experiencia, tanto a nivel profesional como personal porque siempre he tenido el deseo de entrenar en Asia. Me llama mucho la atención la cultura y el deporte de allí. Además, al ser por poco tiempo no tuve ninguna duda.

¿En principio es un mes?

Sí. Existía la posibilidad de estar más tiempo, pero tengo una niña de un año y cuatro meses, y era complicado comprometerme más en un sitio que no sabes si va a ser el ideal para todos. Una vez allí, veré y, si todo encaja, existe la opción de ir más tiempo el año que viene.

¿En qué va a consistir tu trabajo en Corea del Norte?

Voy a trabajar en un programa de tecnificación con los jugadores y jugadoras de las selecciones, y con los técnicos de Corea del Norte. A partir del año que viene sí existe la posibilidad de entrenar a alguna selección para el Campeonato de Asia, pero, en principio, ahora solo se trata del programa de tecnificación.

EntrevistaRicardoGonzalez2Tras conseguir el Campeonato de España cadete masculino de Selecciones Autonómicas
en 1999, junto a José Antonio Ramírez y Alberto Moreno.

¿Qué referencias tienes del baloncesto norcoreano?

En los cuatro años que he estado en Suramérica [Chile y Bolivia], al no estar en mi entorno, con mis amigos, tenía mucho tiempo para ver baloncesto. Me gusta mucho el baloncesto de Asia y África, y tuve la oportunidad de ver por internet Campeonatos FIBA. El nivel del baloncesto femenino de Corea del Norte es muy bueno, pelean siempre por las medallas. Es verdad que el masculino está más abajo en el ranking, pero van subiendo año a año porque es un país con muy buenas instalaciones deportivas en el que se entrena mucho. Seguro que irán mejorando.

Empezando por el principio, comenzaste a entrenar en el colegio Agustiniano...

Era jugador de Agustiniano y ahí empecé a entrenar. Recuerdo que entrené una generación con la que fuimos campeones de Madrid dos años seguidos. A jugadores como Rafa Velázquez y Juan Gil, que después llegaron a EBA, luego les entrené en la selecciones de Madrid infantil y cadete.

EntrevistaRicardoGonzalez3¿Cómo recuerdas tu etapa en la Federación de Baloncesto de Madrid?

Los años de la federación fueron extraordinarios. Tuve la suerte de empezar a trabajar para la FBM con 19 años, primero como delegado de la selección, luego como ayudante y después estuve diez años como seleccionador, con la infantil y la cadete masculina. Lo recuerdo con muchísimo cariño, tanto personal como profesionalmente, porque me dio la oportunidad de entrenar a jugadores increíbles. Es una gran suerte entrenar, aunque solo sea un mes al año, a Felipe Reyes, Antonio Bueno, Rodrigo de la Fuente, Borja Larragán, Maciej Lampe, Roberto Núñez, Eduardo Hernández-Sonseca... jugadores muy buenos. Es un recuerdo imborrable. También tengo un gran recuerdo de Juan Martín Caño, que, aparte de ser mi presidente durante muchos años, para mí es un gran amigo.

Has hablado de jugadores, pero cuando diste el salto al baloncesto nacional fue entrenando femenino...

En la Federación entrenaba a las selecciones masculinas. Un día le planteé al presidente que me aburría entrenar solo unas semanas al año y me dijo que, por un problema de incompabilidades, si quería entrenar en un club solo podía ser femenino. Por eso empecé a entrenar en Majadahonda y... empezamos a ganar. Ganamos campeonatos de Madrid, de España... Nos fue muy bien y surgió la opción de Burgos, donde ascendimos a Liga Femenina. De ahí me marché a Chile.

En ese país hiciste historia...

La verdad es que siempre nos clasificamos entre los tres primeros, junto con Brasil y Argentina, ganamos cuatro medallas... Nos situamos en el top de América. Deportivamente fueron los mejores resultados de la historia de Chile. Eso te abre muchas puertas en ese continente. Entre eso y las ganas que tenía de volver a entrenar masculino salió lo de Bolivia, que también ha sido una experiencia muy buena.

Has entrenado indistintamente masculino y femenino, ¿hay diferencias?

El baloncesto es el mismo. Para algunos entrenadores a lo mejor el nivel de exigencia puede ser diferente, pero yo he entrenado masculino antes de empezar con el femenino y para mí el nivel de exigencia y de competitividad es el mismo. Siempre lo he mantenido. Creo que se puede hacer lo mismo con ellas que con ellos, y a lo mejor eso es lo que me ha dado tan buenos resultados entrenando baloncesto femenino. Evidentemente, las mujeres no pueden machacar, pero ese es un hecho puntual. Las mujeres pueden defender igual, correr igual, competir igual, y para mí no hay ninguna diferencia. Es igual de grato, bonito y divertido entrenar baloncesto masculino que femenino.

¿Qué referentes tienes como entrenadores?

Mantengo mucha amistad con la gente de mis primeros años, la que fue creciendo conmigo: Jota Cuspinera, que es íntimo amigo mío y con quien mantengo una relación casi diaria, Luis Guil, Javi Juárez... Son entrenadores con lo que he compartido mucho, con los que me he formado, he crecido y me he enfrentado en las canchas. Y fuera de Madrid, Sito Alonso, Andreu Casadevall o Txus Vidorreta.

EntrevistaRicardoGonzalez4En su exitosa etapa con la selección femenina de Chile.

¿Cómo se lleva esa etiqueta de ser el trotamundos del baloncesto español?

Lo que sí te digo es que nunca pensé que este viaje a Corea del Norte fuera a tener tanta repercusión. Lo entiendo, pero a mí me ha superado un poco. Para mí es una etapa más, como lo de Chile o Bolivia, no le doy demasiada importancia

¿El futuro lo ves en España o fuera?

La estabilidad de un entrenador de baloncesto, o de cualquier otro deporte, es altamente complicada. No pienso mucho en eso, porque quién me iba a decir a mí hace cuatro años que iba a estar tres en Chile, uno en Bolivia y ahora Corea del Norte. Hombre, me encantaría entrenar en Europa, más cerca de casa, pero también me siento muy afortunado, un privilegiado, por poder vivir estas experiencias. Gracias al baloncesto he conocido todo el mundo. Conozco América de arriba abajo... Son experiencias que en cualquier otro ámbito profesional no tendría.

¿Te queda África?

He estado. Estuve en Zimbabue, aunque poco tiempo. Y también he tenido opciones de entrenar en África. En el futuro quién sabe..., aunque ahora, con nuestra hija, la prioridad es ella y buscaremos lugares donde podamos estar toda la familia junta.

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