Javier Zamora volvió del Campeonato de España de Selecciones Autonómicas con el oro colgado del cuello por quinto año consecutivo, esta vez al frente de la selección cadete masculina. En esta entrevista para 10Radio, el técnico repasa a Carlos López Zeledón la experiencia de Huelva, su undécimo campeonato de España, y califica la cita nacional del baloncesto de formación como "una de las competiciones más sanas y con mejor ambiente que existen". También desgrana su método de trabajo en la selección madrileña: "Nos adaptamos un poco a la filosofía de juego que traen los chicos, no ellos a la nuestra".  (Fotos: FEB).

Enhorabuena a todos porque habrá sido un campeonato duro...

Hemos disfrutado de la competición y al final hemos obtenido el premio de la medalla de oro. Ha salido todo redondo y los chicos han estado excepcionales.

¿La diferencia con selecciones como Asturias (+94) o Canarias (+62) es tan abuiltada en la pista como se vio en el marcador?

Se dieron resultados muy abultados en la primera fase, producto de todo el poderío físico que agrupamos en esta generación y de la seriedad y el buen trabajo de los chicos durante todo el campeonato, tomándose cada minuto como si fuera el último. Los partidos estuvieron más competidos de lo que dicen los resultados.

Pero son resultados muy llamativos, sobre todo el de Asturias...

Nosotros basamos nuestro juego en una defensa muy agresiva, y un juego muy rápido y vertical. Si encontramos acierto en el tiro y tenemos facilidad para anotar en transiciones rápidas, abrimos los partidos muy rápido, nos encontramos cómodos, jugamos muy alegres y anotamos bastante. En defensa, hemos encajado cuarenta y tantos puntos por partido. Estuvimos bastante sólidos.

¿Eres un entrenador con un cuaderno de jugadas o das libertad a los chavales?

Todos los entrenadores somos más o menos parecidos y en este tipo de selecciones no hay tiempo para estructurar los ataques. Intentas inculcar una filosofía de juego y unas normas que valgan un poco para individual, para atacar zona y la verdad es que jugamos con bastante libertad, siendo muy verticales y con alegría para tirar.

¿Los jugadores se ponen un poco rebeldes si les cambias alguna manera de jugar con respecto a sus equipos?

No. Son jugadores en etapa de formación. Nosotros les cogemos únicamente 15 días, pero todo el mérito y todo el trabajo es de los clubs y de sus entrenadores. A la hora de confeccionar la selección, nosotros intentamos ver un poco la filosofía de juego que traen los chicos y adaptarnos a la generación que tenemos, y no al revés, no ellos a la nuestra. Este año, por ejemplo, hemos tenido muchos jugadores del Real Madrid, que ya practican un juego muy vertical y agresivo. Eso nos ayuda de cara a nuestro trabajo.

Con Usman Garuba o Golden Dike no hay quien pase por ahí...

Este año hemos tenido en la generación un juego interior muy potente. En determinadas situaciones hemos tirado de ellos de cara a dominar el rebote, hacer el campo más pequeño, que sea muy difícil dominarnos en la pintura y cuando nos hemos atascado ellos han tenido una presencia en el juego muy importante.

Viendo los apellidos de los chavales, parece que se está globalizando la cantera madrileña.

Cada Comunidad puede llevar  los jugadores que tengan ficha federativa y estén jugando en dicha Comunidad. Lo que se está globalizando es el baloncesto en general. Nosotros hemos llevado a Huelva diez jugadores españoles, entre ellos a Usman y Golden, que son españoles y juegan con la selección española.

Los padres son una figura muy importante a estas edades, ¿cómo se comportan en estos torneos?

Yo he vivido once campeonatos de España con este y la verdad es que es una de las competiciones más sanas, con mejor ambiente. los chicos están con las demás selecciones en el mismo hotel, con una convivencia absoluta. Para nosotros, los padres son un pilar fundamental porque son los que sufren tener que llevar a los chicos a entrenar, a todos los sitios... y siempre han tenido un comportamiento excepcional.

Los mejores jugadores suelen estar en las canteras ACB, ¿a la hora de seleccionar, se intenta compensar o se elige a los mejores?

Hay generaciones de todos los colores. En algunas generaciones tán presentes ocho o nueves colegios o clubs, y en otras, como nosotros este año, solo canteras ACB. Hemos llevado jugadores del Real Madrid, el Estudiantes y el Fuenlabrada. Nosotros seleccionamos a los mejores, pero siempre habiendo visto antes todos los clubs y colegios de la categoría. Cuanto más se acerca a sénior, más fácil es que esos jugadores estén en canteras ACB, pero son fruto del trabajo de todos los entrenadores que han tenido antes, desde que empezaron a jugar en sus colegios o escuelas. Es una satisfacción para cualquier club o colegio ver que un jugador que ha salido de allí va a un Campeonato de España.

¿Te gusta más el hecho de estar con jugadores en formación o preferirías entrenar a jugadores ya formados?

Me encuentro cómodo en la situación en la que estoy. Tengo la suerte de pertenecer a una cantera como la del Movistar Estudiantes, una de las mejores en las que se puede estar, y estoy bien donde estoy. Se puede disfrutar igual llevando un equipo de categoría FEB, un júnior o un cadete.  Ver a un jugador tuyo en la selección madrileña o en la nacional, que debute en ACB...  Son estímulos que tenemos los entrenadores de formación. Es un trabajo muy satisfactorio.