Carlota Egusquiza, Loty para sus numerosos amigos, falleció el jueves 24 de enero a los 31 años después de tres años y medio de lucha contra un cáncer. Tres años y medio en los que tuvo fuerzas para reaparecer dos veces con su equipo, el Olímpico 64 Colegio Santa Gema (anotando un triple en cada una de ellas) y en los que nunca perdió la sonrisa ni el optimismo. Un ejemplo de lucha y superación dentro y fuera de las canchas.
Loty comenzó a jugar al baloncesto en las pistas de su Torrelavega natal, creció deportivamente en el CD La Paz, pasó por las selecciones cántabras (donde coincidió con la internacional Laura Nicholls) y llegó a Madrid en la temporada 2005/06, en su primer año sénior. Militó dos temporadas en el Estudiantes para pasar después al CB Pozuelo, el Olímpico 64, el CB Las Rozas, el CREF ¡Hola! y, desde la temporada 2015/16, de nuevo al Olímpico 64, club en el que tuvo ficha federativa hasta el trágico desenlace.
En agosto de 2015 comenzó la lucha contra el cáncer, detectado tras una revisión rutinaria. Ahí empezó una batalla que se endureció un año después, cuando le detectaron metástasis pulmonar. Desde ese momento, Loty Egusquiza se puso dos objetivos: superar la enfermedad y volver a las pistas. Lo hizo por primera vez, por sorpresa, el 8 de abril de 2017, en el partido de Liga Femenina 2 contra el Baloncesto Leganés. Ni siquiera sus compañeras del Olímpico 64 lo sabían, pero cuando faltaban tres minutos para el final del encuentro, se quitó el chándal, el gorro que cubría los efectos de la quimioterapia y saltó a la pista ante la sorpresa de todos. Su primer intento de triple no entró, pero sí el segundo. Un triple contra el cáncer. "Ese momento se convirtió en el mejor de mi vida y lo del triple fue un regalo del destino", comentó en esta entrevista.
Su regreso a la canchas, por sorpresa, en abril de 2017.
Tras una nueva recaída, con graves problemas en una pierna, la lucha continuó durante la temporada siguiente, de nuevo con optimismo y con el baloncesto, el deseo de volver, como parte de la terapia. Lo hizo de nuevo el 28 de enero de 2018 ante el Valencia Basket, esta vez avisando con antelación, con numerosos familiares y amigos en las gradas del SAGE, y, de nuevo, con triple, esta vez al primer intento. Galería de fotos del partido. Un regreso soñado bajo su lema: #ladoizquierdoladofuerte
Su triple en la segunda reaparición con el Olímpico 64 levantó el pabellón.
En el último año, Loty presentó en Madrid y Torrelavega un documental sobre su lucha contra el cáncer, recibió homenajes (entre ellos, el Premio Atlas Inspiración del Baloncesto Torrelodones y la presidencia de honor del torneo de Basket Veritas) y fue objeto de numerosas entrevistas. "A la gente que está en una situación como la mía solo le puedo decir que nunca hay que rendirse", dijo en Torrelodones. Siempre con una sonrisa, con optimismo, sin perder la esperanza, como demostró hasta el último momento en sus redes sociales. Adiós a una luchadora.
Recibiendo el premio Atlas Inspiración del Baloncesto Torrelodones, en marzo de 2018.