En los últimos años, el número de mujeres jugadoras, atletas, entrenadoras, árbitros y representantes en las federaciones se ha incrementado, pero todavía son una minoría. La experiencia de las deportistas y profesionales que participaron en el coloquio Mujeres en el Deporte, organizado el jueves 8 de junio por el Baloncesto Torrelodones, el Ayuntamiento de Torrelodones y la FBM, dejó claro que no debería haber más diferencias en el deporte que las que marca la propia práctica de cada disciplina.

Durante el coloquio, la psicóloga Elena Estrada ofreció un repaso general a la situación en que se encuentra actualmente la mujer en la práctica deportiva, las razones que han favorecido esa situación y as herramientas que nos pueden permitir mejorarla.

La árbitro Sara Peláez contó su experiencia en una práctica profesional que tradicionalmente ha estado marcada por los hombres. Afortunadamente en los últimos años la presencia de mujeres en el arbitraje se ha incrementado, tanto en las categorías de base como en las competiciones más altas. Mientras, jugadoras y exjugadoras del Baloncesto Torrelodones contaron cómo ha influido este deporte en sus vidas. En algunos casos, competir en la NCAA les ha servido para ver claramente las diferencias de apreciación del deporte femenino entre Estados Unidos y España.

Alessandra Aguilar, única mujer que ha corrido la maratón en tres Juegos Olímpicos, y Laura Quevedo, medalla de plata en los Juegos de Río, ofrecieron el punto de vista más profesional. Dos de nuestras mejores deportistas que viven constantemente los problemas a los que se enfrentan por ser mujeres: publicitarios, económicos, en la prensa e, incluso, por parte de los organizadores de eventos.

En la mesa redonda, que estuvo moderada por Carlos Beltrán (concejal de Deportes de Torrelodones), también participó Borja Castejón, director técnico de la Federación de Baloncesto de Madrid. Desde hace años, la FBM trabaja para potenciar el baloncesto femenino organizando planes de formación y seguimiento dirigidos específicamente a jugadoras. La conclusión de la jornada fue unánime: todas las personas tienen derecho a disfrutar de los beneficios del deporte, del de base y del profesional, sin diferencias de género.