El CB Colmenar Viejo tuvo un comienzo fulgurante. En 1999, solo cinco años después de su fundación, ya estaba en Liga EBA, donde permaneció siete temporadas, fase de ascenso a LEB incluida (en la foto, el equipo que la jugó). Pero después dio un giro de timón. En 2007, justo antes del estallido de la crisis económica, cerró una etapa y abrió otra: una decidida apuesta por la cantera. El club colmenareño concentró sus fuerzas en relanzar el baloncesto de base en un municipio dominado por otros deportes (el fútbol entre los chicos y el voleibol entre las chicas) y ya se ha hecho un hueco. Ahora se trata de seguir creciendo.
El CB Colmenar Viejo se fundó en 1994 (hace ahora 20 años) vinculado a un club de Madrid, el CB Pella. Lo hizo con un solo equipo, un senior masculino. Pero antes del nacimiento formal ya había baloncesto en Colmenar Viejo. Antonio Aragón, presidente del club, recuerda que "el primer baloncesto llegó en los años 60 ó 70 con la Organización Juvenil Española, la OJE. Posteriormente jugamos un par de años de manera informal, sin estatutos". De aquella época, Aragón rememora enfrentamientos "contra los Ryders de Torrejón, un equipo de militares de la base. Como referencia, Pep Cargol era entonces juvenil del Real Madrid". Un dato que sitúa ese equipo a comienzos de los 80.
El primer equipo infantil masculino, al año siguiente de la fundación del club.
Después llegó un largo paréntesis, hasta 1994, cuando surgió el nuevo proyecto. Primero como filial del Pella. Un año más tarde, y ante la buena aceptación, con personalidad propia. "Nos convertimos en el Club Baloncesto Colmenar Viejo con el objetivo de relanzar la historia del basket en Colmenar, que estaba completamente copado por el fútbol". Aragón explica que "aquí tenemos tres clubs de fútbol, con 600 o 700 niños cada uno. Te das una vuelta por cualquiera de los campos y ves bebés jugando al fútbol".
El CB Colmenar Viejo se convirtió en el refugio del baloncesto en el municipio y, sin hacer campañas de promoción, fue ganando adeptos. Primero con dos equipos de cantera, un cadete y un infantil, que sorprendieron a todos con sus buenos resultados. Pero, sobre todo, el efecto llamada llegó con los éxitos deportivos del senior, liderado por nombres importantes del baloncesto madrileño. El primero fue Javier Juárez. "Su familia es de Colmenar. Vino como jugador y cuando lo dejó, empezó a entrenar aquí. Es el artífice principal de que club tirara para adelante, se puede decir que es el alma mater del club", dice el presidente. De la mano de Juárez llegaron otros nombres de prestigio, como Luis Guil, antes de escalar hasta la ACB, y Miguel Ángel Aranzábal, en un paréntesis en su larga carrera en el Real Canoe.
El primer equipo en la temporada 2004-05, aún en EBA, con Pedro Fajardo al mando.
Entre los jugadores, Juanjo López, Antonio Oquillas y Carlos Arjonilla.
En tiempo récord, el Colmenar Viejo se convirtió en uno de los clubs de referencia del baloncesto madrileño. Su sede actual, la Ciudad Deportiva Juan Antonio Samaranch, aún no existía, Se fundó en 1994 vinculado al CB Pella, de Madridy la actividad se centraba en el pabellón Lorenzo Rico y, en menor medida, en el de la APMIB (Asociación de empleados de Iberia Padres de Minusválidos).
Durante sus cuatro temporadas en Segunda División Nacional, el potente equipo senior empezó a tirar de la cantera y a relanzar el baloncesto en Colmenar Viejo gracias al boca a boca. Sin ninguna publicidad extra. Antonio Aragón hace autocrítica al asegurar que "en nuestro debe tenemos que apuntarnos el hecho de no haber insistido, no haber promocionado más el baloncesto. Hasta hace poco no hemos hecho campaña en los colegios".
En cambio, el presidente rompe una lanza a favor de las autoridades municipales, que "siempre nos han apoyado". Y explica que "desde 1996, poco después de empezar, gestionamos las Escuelas Deportivas Municipales de Baloncesto. Colmenar Viejo es de los pocos municipios que no tienen pérdidas y las subvenciones nos llegan sin problemas, igual que a los demás clubs locales. Al margen del aspecto económico, muchos clubs de la Comunidad de Madrid tienen que pagar por el uso de las instalaciones. Nosotros no".
Con sus luces y sombras, el baloncesto consiguió hacerse un hueco entre la oferta deportiva del municipio. Antonio Aragón concede casi todo el mérito a los jugadores y sus familias. "El club ha avanzado porque los niños lo han querido", sentencia. Pero siempre con la locomotora del primer equipo, que en la temporada 98-99 disputó en Castellón la fase de ascenso a Liga EBA. No se consiguió el ascenso deportivo, pero el club aprovechó la renuncia de uno de sus rivales para debutar en 1999 en categoría nacional, donde se instaló entre los mejores casi desde el principio.
La progresión continuó hasta alcanzar la cima en la temporada 2005-06 con la clasificación para la fase de ascenso a LEB, aunque se cayó ante el CB Prat. Además de los ya citados Juárez, Guil o Aranzábal, por el banquillo pasaron nombres como Fernando Calero, Ramón Márquez, Pedro Fajardo y Juan Figueroa. Y, a las órdenes de los técnicos, un plantel de jugadores de primera línea como Carlos García Ribas, Alberto García Chapuli, Joe Alonso, Juanito Jiménez, Diego Sancho, Quique Suárez o un joven Carlos Arjonilla, entre otros.
La Ciudad Deportiva Juan Antonio Samaranch, sede central del club.
Tras el descenso de la temporada 2006-07, llegó un cambio de rumbo, un giro radical. "Nos planteamos que la Liga EBA era inviable económicamente y apostamos por potenciar mucho más la escuela". Para entonces, la cantera colmenareña ya había crecido en una doble vía imposible de diferenciar: la escuela municipal y el club. Dos ramas con un mismo tronco. En la temporada 2013-14, el CB Colmenar Viejo ha contado con ocho equipos federados de categorías senior, sub'21, junior, cadete, infantil y preinfantil, más un benjamín, que se quedó sin federar "porque no nos dio tiempo... ¡Y mira que lo siento porque son muchos niños y buenísimos!", reconoce el presidente. En total, alrededor de 140 jugadores y jugadoras.
Una de las prioridades es fomentar el baloncesto femenino. En la imagen el equipo preinfantil 2013-14.
Ya no se trata de luchar por un ascenso a categorías nacionales (EBA o LEB). Las metas ahora son otras, pero eso no significa que no existan éxitos deportivos. En la temporada 2012-13, el junior Federado fue subcampeón después de perder solo un partido. En la 13-14, el senior masculino se ha proclamado campeón de Primera División Autonómica Serie B en la fase final celebrada en el pabellón Lorenzo Rico. Antonio Aragón también destaca el esfuerzo por potenciar el baloncesto femenino. "Desde hace tres años tenemos un senior femenino, y ahora también un preinfantil, que ha sido un logro espectacular porque si en chicos tenemos la competencia del fútbol, en chicas está el voleibol. Es casi otra batalla perdida porque aquí todas las niñas se van al volei". De la doble vertiente primer equipo-cantera se ha pasado a un club unificado, "En chicos tenemos la competencia del fútbol y en chicas la del voleibol"en el que todos reciben el mismo trato: "¿Por qué un senior tiene más derechos que un niño? ¡En absoluto! Aquí cada uno paga sus cuotas. A un EBA tendría que pagarle, es evidente, pero a un Primera Autonómica no".
La prioridad es fomentar esa cantera colmenareña. "Ahora en el senior puedo dar salida a los junior. Hay gente muy válida. Quizá no llegarán a EBA o LEB, pero merecen la pena y pueden hacer un buen papel en Autonómica. De hecho, hay alguno que es una máquina y hace cosas que no le he visto hacer a nadie..." Si antes los logros del primer equipo servían de reclamo, ahora el club se identifica más que nunca con el municipio. "Menos el senior femenino, en el gran parte de las chicas son de fuera, todos los jugadores son de Colmenar". Se mantiene la competencia de otros deportes, pero, en el lado positivo, el club cuenta para su trabajo diario con el amplio pabellón del complejo Juan Antonio Samaranch. No en exclusiva, pero casi. "Hasta hace poco solo estábamos nosotros. Ahora lo compartimos con el bádminton, pero no somos un club excesivamente grande, así que nos da para entrenar sin problemas".
Campeones de Primera Autonómica Serie B, uno de los últimos éxitos deportivos.
Aparcados los grandes retos deportivos, las miradas se dirigen a seguir creciendo, en un municipio que ha pasado de 28.000 habitantes en 1996 (tras la escisión de Tres Cantos) a los 47.000 actuales. "Por fin se ha empezado a hacer promoción en los colegios, aunque en algunos casos otros han sido más listos que nosotros y han llegado antes", dice el presidente, que reflexiona: " Si los chavales están aquí hora y media, es hora y media que no están con la play o el ordenador, en el mejor de los casos. Tenemos que seguir peleando por ello".