Federación de Baloncesto de Madrid

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ENTRENADORES - Otras actividades

Los fundamentos individuales paso a paso



Bote, pase y tiro. Trabajo analítico y trabajo global. Tres fundamentos y dos formas complementarias de ejercitarlos. En el marco de los los XII Laboratorios Monográficos, organizados por la Escuela de Entrenadores de la FBM con la colaboración del c...

XIILaboratorioMonografico Foto1Bote, pase y tiro. Trabajo analítico y trabajo global. Tres fundamentos y dos formas complementarias de ejercitarlos. En el marco de los los XII Laboratorios Monográficos, organizados por la Escuela de Entrenadores de la FBM con la colaboración del club Valcude y el Ayuntamiento de Alcobendas, Gabriel Álvaro desmenuzó en hora y media la enseñanza de los grandes fundamentos individuales del baloncesto. Decenas de técnicos presenciaron en el pabellón Distrito Centro una serie de ejercicios destinados a trabajar el bote, el pase y el tiro. Primero sin oposición, de manera analítica; después con una oposición pedagógica para acercarse al juego real.



 

 

Gabriel Álvaro, entrenador superior, profesor de la Escuela de Entenadores y, en la actualidad, al frente del Real Madrid A infantil, adelantó que la sesión sería sencilla, al alcance de todos y válida para prácticamente todas las categorías, de canasta pequeña a sénior. Y así fue: hora y media de conceptos muy claros y concretos, con un alto valor pedagógico.

XIILaboratorioMonografico Foto3El técnico contó con la ayuda de jugadores cadetes del Valcude Alcobendas, que comenzaron la sesión con ejercicios de bote. Primero de manera analítica, técnica individual pura, sin oposición, pero con una consigna que se mantuvo durante toda la charla: máxima velocidad. Sin rivales no hay frenos. Poco a poco, Gabriel Álvaro introdujo dificultades añadidas, como limitar el número de botes, utilizar la mano no dominante o combinar desplazamientos laterales y progresiones a canasta. Siempre a máxima velocidad, con correcciones de gestos técnicos como la orientación de los pies, pero sin preocuparse demasiado de las  imprecisiones, habituales en edades tempranas. "La velocidad de ejecución no depende de la edad. Hay que hacer los ejercicios siempre a toda velocidad para mecanizar el gesto", dijo el Álvaro.

Del trabajo analítico se pasó al global, una relativa oposición con un objetivo: "Aprender a tomar decisiones". El primer ejercicio fue sencillo, y también lúdico, una guerra de botes, adecuada para el trabajo con los más pequeños pero también muy provechosa tanto en el aspecto técnico como en el táctico. Después mostró ejercicios más complejos que requerían mayor concentración y más conocimientos técnicos.

Gabriel Álvaro empleó el mismo sistema con el segundo fundamento individual, el pase. Primero, ejercicios analíticos y sencillos, pero también adaptados a las situaciones reales. Nada de pases de pecho, a dos manos; sí escorados, con mano y media. Y, siempre, a la máxima velocidad. "El balón es una bola de fuego, ¡quema!", dijo para estimular a los jugadores a soltarlo lo antes posible. Los pases, de distintos tipos, se combinaron con rápidos desplazamientos, hacia adelante, en diagonal o laterales, antes de llegar al trabajo global que incluyó la defensa, limitaciones como no salirse de la línea de 6,25 y en el que aparecieron las fintas. Ejercicios diseñados para "enseñar donde están las ventajas" y fomentar la táctica porque, como repitió en varias ocasiones, "el trabajo analítico no tiene significado sin el global".

Las consigna básica, la velocidad, se mantuvo en el trabajo del tiro. Velocidad en el gesto,  en los movimientos y en la toma de decisiones, siempre con orientaciones pedágogicas. "En cuanto realizas una acción debes estar pensando en la siguiente", dijo Gabriel Álvaro. Como en los anteriores fundamentos, la dificultad fue de menos a más. Ejercicios para edades tempranas y para las más avanzadas. "Los jugadores aprenden siempre. Con el trabajo analítico aprenden a mecanizar los gestos, con el global a actuar y tomar decisiones", puntualizó. Precisamente, el Laboratorio Monográfico se cerró con dos ejercicios complejos destinados a ejercitar esa toma de decisiones. El primero, prestado de la libreta de un maestro de entrenadores como Josep Bordas, incluia pase, bote, tiro y finalizaciones bajo un estímulo visual que exigía concentración. Una concentración que se hizo aún más intensa en el segundo, con conos numerados y secuencias de movimientos, siempre con la mayor velocidad de ejecución posible y con sentido táctico porque "los fundamentos requieren de una aplicación. No vale solo con saber botar, hay que saber el cuándo, el dónde y el para qué".

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Gabriel Álvaro dirige un ejercicio de pase en la pista del Distrito Centro.

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