El V Clinic Estival para entrenadores de base, organizado por la Escuela de Entrenadores de la FBM con la colaboración del Ayuntamiento de Alcobendas y el club Valcude, unió la experiencia de Josep Bordas y José Manuel Beirán con el talento de uno de los técnicos madrileños con mayor proyección, Javier Fort. La formación con el juego de ataque (contra una defensa en zona, en transición ofensiva...). Y la necesidad de pensar sobre la cancha con el automatismo del tiro.
José Manuel Beirán, plata olímpica en Los Ángeles'84 y uno de los mejores tiradores de la historia del baloncesto español, abrió el Clinic, celebrado en el pabellón Distrito Centro de Alcobendas, con una charla que tenía un título muy concreto: 'El Tiro'. El objetivo del baloncesto es meter canastas y estas llegan con un tiro. Por eso Beirán considera que "hablamos del fundamento más importante del baloncesto". Pero la acción de tirar está rodeada de muchos matices. Beirán, de profesión psicólogo deportivo, aseguró que lo importante no es solo la mecánica, también están, entre otros aspectos, la confianza del jugador y la presión a la que está sometido.
José Manuel Beiran habló sobre el tiro ante decenas de jóvenes entrenadores.
El exjugador dejó claro desde el principio que "no existe un tiro perfecto ni podemos pretender que alguien lo tenga. Cada jugador tiene un tiro diferente y a cualquiera le podemos encontrar errores. Lo importante es saber qué hay que cambiar y qué no". También fue contundente al asegurar que, al contrario que en el resto del juego, en el lanzamiento está prohibido pensar. "Eso es lo peor que hay en el tiro. Cuando tiras debes tener confianza, pero no pensar en nada. Por eso a veces el tiro libre es peligroso, porque tienes demasiado tiempo para pensar". El paso previo es una mecánica muy trabajada. Y no solo eso: "La mecánica es el 25 por ciento del tiro. Además, hay que tirar siempre igual, hacerlo con rapidez, tener decisión, saber tirar bajo presión...".
La charla estuvo cargada de ejemplos conocidos por todos. Desde el triple decisivo de Alberto Herreros en la final de la Liga ACB de 2005 ("cuando Alberto tiró no pensaba en nada. Si lo hubiera hecho, no lo mete") hasta el más actual Jaycee Carroll ("esté donde esté, siempre tira igual de rápido"). Y también modelos ajenos al baloncesto: "Aprender a tirar es como aprender a conducir, repetir algo muchísimo hasta que sale automáticamente".
Beirán aconsejó la práctica de ejercicios básicos, como botar el balón por delante del cuerpo y recogerlo por detrás, antes de sumergirse en la mecánica del lanzamiento que detalló paso a paso: los pies ("el equilibrio es fundamental"), las piernas ("la fuerza del lanzamiento viene de las piernas"), el agarre y la subida del balón... En hora y media de charla hubo tiempo para más consejos, como aprovechar el verano para mejorar practicando, y para hablar de los mejores tiradores de la historia. Una lista en la que Beirán incluye, entre otros, a Oscar Schmidt, Reggie Miller, Drazen Dalipagic, el ya fallecido Mirza Delibasic y Juan Carlos Navarro.
La primera jornada del Clinic se completó con la charla de Javier Fort, que dirigió la pasada temporada al Lotos Gdynia femenino polaco. Su conferencia fue todo un manual sobre cómo atacar una defensa en zona, empezando por dos conceptos básicos: la ocupación de espacios y la búsqueda de ventajas.
La ocupación de espacios es una de las claves para atacar la defensa en zona.
Con la ayuda de algunos de los asistentes, el entrenador madrileño mostró situaciones de ataque contra zonas 2-3 y 1-3-1 en las que se pudo ver el trabajo de ocupación de espacios, la importancia del bote para atacar la zona y dividirla, y el pase. "Es fundamental que los jugadores sepan pasar bien porque contra una zona el balón tiene que circular muy rápido", señaló Fort, quien destacó el pase skip de un lado a otro de la cancha y la función del pase como engaño: "Fintamos con el pase para que el defensa se mueva".
Aunque el ataque contra una zona parece conceder más importancia al juego exterior y los lanzamientos lejanos, Fort se centró en el interior: "El juego poste bajo-poste alto hace mucho daño a una defensa zonal". El técnico no considera necesario tener pívot tiradores pero sí "jugadores listos y que vayan siempre al rebote de ataque". El repaso alcanzó también al base "que tiene que moverse muy rápido", aunque, como dijo Fort, "lo importante no es el sistema, sino la lectura que hacen los jugadores de esos sistemas".
Una vista del pabellón Distrito Centro durante la segunda charla de Javier Fort.
Fort repitió el jueves con una charla también de vocación atacante: 'Transición ofensiva. Llegar jugando'. La explicación del proceso del contrataque desde el principio, desde el rebote defensivo, que, a vez, se divide en tres pasos: "Coger el rebote, girarse y mirar". Después llega el pase, generalmente al base mientras los aleros esprintan por las bandas. ¿El objetivo? "En tres segundos el balón tiene que estar en el alero del lado contrario", señaló Fort.
Ya en campo contrario, distintas situaciones como 1x1 del alero o el juego del poste bajo. El entrenador madrileño contó con la colaboración de voluntarios para realizar ejercicios de transición de 5x0, 3x0 (triangulaciones con bloqueos), 4x0 y 3x3, cada vez con mayor intensidad. Una sesión de gran contenido práctico y, como siempre, salpicada de sugerencias para los técnicos de formación: "Hacer los ejercios lo más reales posibles... Que no paremos, que seamos capaces de jugar rápido".
La pausa llegó con la última charla, a cargo de Josep Bordas. El veterano técnico especialista en formación (Federación Catalana, Vive Menorca, Federación Española...) habló sobre 'Metodología del ejercicio' en una conferencia dividida en dos partes. En la primera, sin jugadores sobre la pista pero casi siempre con el balón bajo el brazo, dejó clara su vocación formativa con varios consejos extraidos de la experiencia. "Lo importante es enseñar a jugar a los jóvenes para que ellos interpreten el baloncesto. Saber ejercicios no es saber baloncesto". Quizá por eso, "el mejor ejercicio es el 5x5 y no se debe acabar un entrenamiento sin jugar 5x5".
Según Bordas, el entrenador de formación debe conocer a sus jugadores y adaptar los ejercicios a sus características para conseguir la mayor progresión posible porque "hay muchos ejercicios que el niño no puede hacer". Y es que en estas etapas el marcador es secundario: "Se debe competir, sí, pero en formación lo importante es crecer y mejorar, mucho más que ir a ganar". Todo ello sin olvidar una máxima: "El baloncesto es un deporte individual que se juega en grupo".
El técnico se dirigió en numerosas ocasiones a los asistentes y, tras un nuevo consejo ("no copien los ejercicios, entiendan la idea, sean entrenadores"), contó con varios de ellos para reproducir esos ejercicios sobre la pista, siempre con una especial incidencia en los pequeños detalles: "A veces no les das importancia, pero son fundamentales para el crecimiento de los jugadores. Trabajar estos pequeños detalles, analizarlos, es ser entrenador".
El balón, como símbolo del juego, estuvo siempre presente en la charla de Bordas.
La teoría dio paso a la práctica con ejercicios de 4x4 a ritmo cada vez más elevado, añadiendo complicaciones y corrigiendo errores sobre la marcha. Detalles como el pase mano a mano, y siempre con el 5x5 en mente, sobre todo para categorías de formación, porque "los chicos vienen a jugar, y si no lo hacen se aburren". Borgas pregonó con el ejemplo y, en hora y media larga, su conferencia tuvo de todo menos aburrimiento.