El III Clinic de Navidad para entrenadores en formación tuvo de todo. En el pabellón Pedro Ferrándiz de Alcobendas estuvieron cuatro técnicos de prestigio, Javier Lería, Miguel Ángel López, Gabriel Álvaro y Nacho García. Se habló de defensa, ataque, fundamentos y situaciones especiales de partido. Pero los cuatro ponentes coincidieron en un aspecto: "Lo primero es conocer a los jugadores para saber qué les podemos pedir y qué no". Y a partir de ahí, empieza el trabajo.
El Clinic de Navidad, celebrado el miércoles 19 y el jueves 20, fue la continuación natural del XI Coloquio FBM del martes 18. Al menos en sus tres primeras charlas, dedicadas a la formación de los más jóvenes. En la cuarta, la más técnica, Nacho García habló sobre las situaciones especiales de partido y sus posibles soluciones.
Abrió la jornada del miércoles Javier Lería, que contó con la ayuda del equipo infantil femenino del Club Baloncesto Alcobendas (más dos jugadoras del equipo de Primera Nacional) para su charla sobre la construcción de la defensa. Una conferencia válida para trabajar con jugadores desde alevín hasta cadete. Para empezar, Lería destacó el valor de la defensa "y más ahora, que lo que está de moda es atacar y lograr millones de puntos".
Javier Lería se dirige a los entrenadores que acudieron al Clinic.
¿Por dónde empieza el trabajo defensivo con los más pequeños? Por el "cada uno con el suyo". Pero también es importante defender el aro, evitar que el contrario meta canastas. Y enseguida al chaval se le presentan las primeras dudas: "¿Defiendo el aro o defiendo al mío?". Según Lería, el trabajo del entrenador es responder a esas preguntas y, sobre todo, evitar que la defensa se entienda como un castigo. Para conseguirlo nada mejor que juegos que, a la vez, sirven para trabajar las posiciones defensivas de manera intuitiva. Ejercicios como correr de un extremo a otro de la pista eludiendo a los defensores o esconder el balón en la espalda mientras los rivales intentan capturarlo. Hay movimientos que se descubren solos y otros que no, igual que hay "ejercicios que son pedagógicos pero no son la realidad. Lo que no se debe hacer en ningún caso es cambiar las reglas de golpe", dijo Lería, que dividió la defensa en senior en tres componentes: acción, espacio y tiempo. "Defender es destruir todas las acciones, variar los espacios y retrasar los tiempos del ataque", sentenció.
Tras la defensa individual pura y dura llegan las ayudas "porque si el que tiene el balón se escapa hay que pararlo". La primera ayuda (sobre el atacante con balón) y la segunda (sobre el atacante sin balón) se trabajaron con varios ejercicios. Hay un riesgo, perder la responsabilidad individual. "El jugador puede pensar que si le escapa el atacante no pasa nada porque llegará un compañero a ayudarle, pero hay que dejarle claro que no se le puede escapar, la responsabilidad es suya". Lería dividió la filosofía defensiva en dos tipos ("la defensa agresiva, que ataca al ataque, y la defensa de contención") e ilustró sus palabras sobre la pista con numerosos ejercicios, de balance defensivo, 2x1 o triángulos de ayuda, con un objetivo: "que los jugadores aprendan a ordenar sus prioridades".
Miguel Ángel López habló de fundamentos en toda su extensión.
Ese 'saber lo que hay que hacer y cuándo hacerlo' fue la base de la segunda conferencia. Miguel Ángel López habló sobre enseñanza de fundamentos en edades tempranas, pero no entendiendo los fundamentos solo como técnica individual. "El problema no son los recursos sino que el jugador sepa cuándo usarlos y si es necesario hacerlo. Hay muchos jugadores con recursos, pero no hay tantos con fundamentos". Miguel Ángel López, que contó con la colaboración de jugadores cadete del Alcobendas, rompió tópicos al asegurar que "es igual de difícil defender que atacar" y, como dijo Lería en la charla anterior, aseguró que "cada entrenador y cada equipo tiene su propia formación porque todos los niños son distintos".
Para que el jugador aprenda a decidir es necesario que entienda el porqué. "Que el jugador vea por qué recibe esa orden, para que tenga iniciativa propia y cuando reciba el balón ya tenga claro qué va a hacer". Los jugadores del Alcobendas realizaron ejercicios de 1x1 con continuas correcciones. "Que el entrenador se canse de corregir", recomendó Miguel Ángel López, que insistió: "Los entrenadores deben enseñar los fundamentos, que los jugadores conozcan el cómo, el porqué y el cuándo para que lean el baloncesto y sean capaces de elegir bien". Y siempre en función de cada jugador, porque "el entrenador de formación no tiene una regla fija. Tiene que conseguir lo que sus jugadores sean capaces de dar y progresar con ellos continuamente". ¿La meta?: "Enseñar de verdad para que los jugadores nunca abandonen el baloncesto".
Gabriel Álvaro contó con la colaboración del infantil A del Alcobendas.
La vocación formativa se prolongó en la tercera conferencia, la primera del jueves. Gabriel Álvaro habló sobre la configuración de un ataque desde la categoría infantil. Para empezar, una premisa: "Los ataques está generados a obtener ventajas de espacio, de tiempo, de superioridad numérica y cualquier tipo de desajuste defensivo". Esta vez fueron los jugadores de infantil A masculino del Alcobendas quienes ayudaron en la charla. Comenzaron con ejercios de dinámica de pases, con el menor número posible de botes. Se trabajaron conceptos como la tensión o el timing, siempre concediendo cierta libertad al jugador: "Los entrenadores los guiamos, pero son los jugadores quienes encuentran el camino. Hay que conseguir que se acostumbren a leer el partido y a elegir la mejor opción".
Con ese objetivo, Gabriel Álvaro mostró ejercicios de 1x1 con y sin balón, 2x2, 3x3... Incluso algunos que pasaban progresivamente del 1x1 al 5x5 o del 5x0 al 5x5, con 'trucos' como cambiar el valor de algunas canastas para estimular determinadas acciones ofensivas. Casi todo vale para aprender a leer las ventajas. Además del trabajo práctico en la cancha, el técnico describió los tres tiempos de la toma de decisiones: pausa, lectura y ejecución. Y un último consejo: "El trabajo no puede estar encorsetado, que el jugador crezca a través de las normas que le da el entrenador".
El Clinic de Navidad se cerró con la conferencia de Nacho García, entrenador del Grupo EM Leganés de Liga Femenina 2, sobre situaciones especiales de partido. Cien por cien estrategia, fue la charla más técnica de las cuatro. En las situaciones de estrés, cuando se necesita una canasta en pocos segundos, "hay que transmitir muchas cosas en poco tiempo y -como dijo Nacho García- en este caso, la suerte no existe. Hay que tenerlo todo entrenado". El técnico recreó distintas situaciones sobre la pista del Pedro Ferrándiz siempre con un 5x5. En estas situaciones de urgencia, la figura del base cobra una importancia especial porque "tiene que controlar todo lo que está pasando, en un extremo de la cancha y en el otro".
La charla fue una sucesión de jugadas extraidas de la realidad, como situaciones de banda y de fondo o bloqueos y continuaciones, siempre salpicadas por los consejos y correcciones del entrenador. Por ejemplo. "Es fundamental ocupar las esquemas y hacer el campo lo más grande posible". Desde las jugadas más complicadas hasta las, aparentemente, más sencillas, como el pase directo desde el fondo al poste alto; supuestos como la necesidad de transformar un triple a falta de 20 segundos o acercarse a canasta desde el centro de la pista en apenas ocho. Toda una lección de estrategia para culminar dos días de formación en Alcobendas.
Nacho García repasó diferentes situaciones de estrés y sus posible soluciones.