Canarias fue demasiado. La selección cadete femenina cayó por 51-76 y se jugará el bronce del Campeonato de España contra el País Vasco el domingo a las 11:00 h., media hora de la final entre Cataluña y Canarias. Salvo los instantes iniciales, las madrileñas apenas pudieron oponer resistencia a un equipo canario que en el descanso ya mandaba por 23-40 y tuvo a Kamara Ndeye (22 puntos, 19 rebotes) como jugadora clave.
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Madrid 51 (13+10+13+15): Carmen Grande, Raquel García, Marta Hermida, María Conde, Cecilia Muhate -cinco inicial- Nuria Román, Blanca Ruiz, Marta Sánchez, Irene Vicente, Inés Mata, María Iglesias, Lucía Fernández.
Canarias 76 (23+17+19+17): María Teresa Cazorla, Iris Junio, Kamara Ndeye, Aida Dolores, Nieves Gil -cinco inicial- Lidia Bacadallo, Noelia González, Marta Lorenzo, Duna González, Carla González, Naira Cáceres, Umo Diallo.
Árbitros: Bartolomé y Estévez.
Vídeo de Baloncesto Cantera
Tras el susto de la mañana contra Castilla y León, llegaba la hora de la verdad para la selección cadete femenina: la semifinal contra Canarias, un equipo más alto (nueve jugadoras por encima del 1,80) y más fuerte. Tras lo visto en la primera fase seguramente el gran favorito del Campeonato, pero quizá no invencible.
Kamara Ndeye anota ante Lucía Fernández y Cecilia Muhate.
Quizá porque en el baloncesto la altura no lo es todo, Soledad Merino cambió en el cinco titular a una jugadora interior, Lucía Fernández, por una exterior, Raquel García. Se trataba de sacar el balón de la zona y correr. Y fue precisamente Raquel García quien abrió el marcador elevándose sobre las pívots canarias. La escolta del Real Canoe repitió, esta vez desde lejos (4-0 a 7:38). Y María Conde amplió la renta con un tiro libre. Las madrileñas llevaban la iniciativa y obligaban a las canarias a jugársela desde fuera. Sin embargo, cuando Kamara Ndeye encontró hueco (5-2), Canarias reaccionó y encadenó varias contras, con Ndeye (10 puntos en el primer cuarto) como brazo ejecutor. El encuentro se complicaba para las madrileñas y con 7-12, Soledad Merino tuvo que parar el crono. Iris Junio ayudó a Ndeye con un triple (9-17) y las canarias se fueron hasta 13-23 al final del primer periodo.
Pese a su inferioridad física, las chicas de Madrid pelearon bajo los aros.
Las madrileñas no se daban por vencidas. Lucía Fernández, ahora referente interior, estaba escoltada por Inés Mata y María Conde. El objetivo era el mismo, alejar lo más posible a las canarias del aro, complicar sus opciones. Pero para remontar también había que anotar, y era muy difícil superar la defensa planteada por el veterano Paco Apeles. Así, a 5:17 para el descanso, la ventaja canaria había aumentado hasta 17-33 tras un triple transformado por María Teresa Cazorla. Marta Hermida le echó valor y se coló por el centro de la zona para hacer el 19-35, pero otro triple dio a las a las isleñas, que se marcharon. ¿Definitivamente? Quizá no, porque Madrid aprovechó sus opciones en los últimos minutos del segundo cuarto y pasó de 17-40 a 23-40.
Quedaba una bala en la recámara, cerrar filas atrás y buscar las opciones en ataque. Pero las canarias, lideradas por Ndeye, encontraron el camino y enseguida volvieron a los veinte de ventaja: 25-45 a 8:05. Pese a los intentos de Marta Hermida o María Conde, la semifinal se ponía demasiado cuesta arriba. A 6:04 para el final del tercer cuarto, 25-50. Igual que sucedió en el segundo, Madrid, impulsada por Nuria Román, tiró de orgullo para acercarse (29-50), pero el 36-59 al final del tercer cuarto dejaba el partido casi sentenciado. El último apenas tuvo historia. A cinco para el final, el marcador estaba en 39-68, Paco Apeles dio minutos a las cuatro que no había jugado, y las madrileñas comenzaron a pensar en el duelo del domingo por el bronce (11:00 h.)
Nuria Román fue una de las jugadoras más destacadas de la selección madrileña.