Gracias al trabajo realizado durante toda la temporada en sus clubs y a la cohesión del grupo en las concentraciones de la selección, el combinado masculino de Madrid volvió de San Fernando con la medalla de oro. Dos de los jugadores ya tenían experiencia en campeonatos de España, el capitán Héctor Alderete y Usman Garuba, determinante bajo los aros. Los demás debutaban, y no lo pudieron hacer mejor. El seleccionador, John Paul Turner, analiza uno a uno a los campeones de España y destaca sus fundamentos técnicos, humildad y carácter ganador, que les hace pelear por cada balón como si fuera el último.

LOS CAMPEONES DE ESPAÑA SEGÚN EL SELECCIONADOR, JOHN PAUL TURNER

4. Pablo Rico García.
Base, 1,47 m. (Distrito Olímpico)
"Tiene el cerebro lleno de baloncesto. Entiende a la perfección todo lo que le piden los entrenadores y siempre abraza con fuerza su responsabilidad como base, ¡el base que todo entrenador quiere! Sus fundamentos individuales están al nivel de la cabeza tan amueblada que tiene".

5. Alejandro de Villalobos Paz.
Escolta, 1,55 m. (Liceo Francés)
"La electricidad personificada, dentro y fuera de la pista. Es un jugador divertidísimo por tres aspectos: tiene una calidad física sin igual, una capacidad creativa importante y es uno de los grandes tiradores del equipo".

6. Jorge Fernández Maldonado.
Base, 1,55 m. (Instituto Veritas)
"¡El kamikaze! Nunca se ha visto un jugador con tan poco respeto por su cuerpo. Esto le hace ser muy vertical al aro y un excelente defensor porque no tiene miedo a ningún contacto. Es un gran compañero de equipo. En el sexto periodo de la final salimos con un quinteto demoledor físicamente (altura, alcance, envergadura y fuerza) en el que no estaba... pero ¡estaba más emocionado que si hubiera salido!".

Jorge Fernández, siempre a por el balón, en un momento de la final. Foto: FEB

7. Eduardo Manzano Plaza.
Base, 1,56 (San Viator)
"Es uno de los jugadores de la selección que imprime más carácter en todas las acciones que realiza. Su dureza en los contactos, combinado con su calidad para pasar, le convierten en un jugador divertido de ver en el campo. Me ha sorprendido con acciones preciosas a lo largo de toda la preparación y del campeonato. ¡Mucha clase!"

8. David García Álvarez.
Escolta, 1,62 (Tres Cantos)
"Le llamamos Tim Duncan por su calma y sosiego tanto en la pista como fuera de ella. Tirador de gran calidad, que siempre sabe lo que se necesita de él en el campo. Es un gran tirador, pero también deslumbra con detalles de máxima calidad tanto en la toma de decisiones como en la ejecución. Un defensor con una concentración y colocación excelente".

9. Mikhail Mikhailov Paltarak.
Alero, 1,68 m. (Alcobendas)
"Tiene gran capacidad competitiva y siempre intenta encontrar soluciones para anotar. Cuando no mete tiros limpios o entradas con contacto, se va a buscar los puntos al tablero en el rebote o en el contraataque. Nunca se rinde y siempre busca una manera de aportar".

10. Luis Guerra Pérez.
Alero, 1,74 m. (Tres Cantos)
"Luis es un gran luchador. Se puso malo durante el campeonato y a pesar de perderse dos partidos ha competido en los más importantes a muy buen nivel. Aporta tanto en defensa, defendiendo posiciones diferentes con gran efectividad, como en ataque, con una toma de decisiones muy variada. ¡Es un jugador muy completo!"

En su tercer Campeonato Mini, Héctor Alderete conquistó el oro. Foto: FEB.

11. Héctor Alderete.
Alero, 1.82 m. (Estudiantes)
"El veterano x3... En su tercer campeonato de España ha demostrado que es capaz de aportar en todas las facetas del juego, atacar y defender contra bases jugones o postes dominantes. Ha jugado en todas las posiciones. Su polivalencia nos daba muchas posibilidades como equipo. Su personalidad tiene un valor incalculable tanto fuera como dentro del campo porque es una fuente de motivación constante para todos, y, además, tiene una gran humildad".

12. Javier Ramos Izquierdo.
Ala-Pívot, 1,78 m. (Majadahonda)
"Es un ejemplo de humildad y trabajo. Ha sido un gusto poder tenerle en el equipo y darle minutos en el campeonato. Aprovecha y agradece cada segundo que entrena y juega. Es un trabajador incansable y tiene una empatía sin igual".

13. Pablo Rodrigo Fernández de Heredia.
Ala-Pívot, 1,78 m. (Alcobendas)
"Es un jugador mini en estado puro. Es como un estilete, encuentra siempre el espacio por donde colarse para ir al aro. Ha sido el jugador más incisivo cara al aro del campeonato. Y la cosa no queda ahí, ha sido un gran reboteador y un gran defensor".

Pablo Rodrigo protege un balón en presencia del seleccionador, John Paul Turner. Foto: FEB

14. Rubén López de la Torre.
Pívot, 1,84 m. (Distrito Olímpico)
"Cada vez que tuvimos presión o un momento tenso, ahí estaba él para ayudarnos. Nuestra segunda presencia física en el campo. Podía defender exterior o interior y atacar exterior o interior. El aspecto más determinante de su juego ha sido la dureza con la que ejecutaba cada acción. Eso le ha llevado a hacer tapones y mates espectaculares".

15. Usman Garuba.
Pívot, 1,94 m. (Real Madrid)
"El veterano x2. En su segundo año en el campeonato, fue determinante. Su gran defensa y presencia física nos daba muchas facilidades para tener una defensa más arriesgada. Si no conseguía una parada defensiva, ponía un tapón. Si no ponía un tapón, modificaba un tiro. A pesar de los nerviosos que estábamos todos, incluido él, en la final fue donde tuvo más movimientos de calidad en el poste bajo. Bajo los aros ha sido el jugador más dominante del campeonato, pero su juego va más allá de ser grande, hacer mates y poner tapones. ¡Ah!, y se me olvidaba: fuera del campo nos ha divertido mucho con sus bromas".

Jugadores y técnicos celebran la victoria, con Usman Garuba en el centro. Foto: FEB.

CUERPO TÉCNICO

Roberto Ruiz Bella. "El 'fisio' debe tener un stand de medallas en su casa. Es un gran educador en hábitos de alimentación y comportamiento tanto fuera como dentro de la pista. A pesar de que no les pase ni una a los niños, luego se rinden a sus pies cuando le conocen. Aunque es totalmente imposible conseguir que esté sentado en un partido (risas), es una persona clave en esta selección".

Pablo Rico. "Tiene el trabajo más complicado de la selección porque debe ocuparse de la logística y solucionar problemas que nos surgen tanto a los entrenadores como a los niños. Con todo el trabajo que tiene que hacer y lo poco que duerme, siempre está con una sonrisa en la cara, y listo para hacer y recibir bromas".

Diego Grande. "¡Gran entrenador y gran persona! Diego lleva trabajando con niños... ni se sabe cuántos años. Siempre demuestra su experiencia con apreciaciones sensatas y muy útiles. Es encantador con los niños y entiende su estado emocional a la perfección. Se aprende mucho estando cerca de él".

Fernando Gila. "Ha hecho un gran trabajo analizando jugadores y táctica de los equipos rivales. Es divertido estar con él porque disfruta como el que más de cada entrenamiento y cada partido".

La Federación de Baloncesto de Madrid quiere agradecer a los clubs y sus entenadores su gran trabajo y labor, y dedicar la medalla de oro a todos los jugadores que han participado en las concentraciones, especialmente a Víctor, Marcos y Pablo.