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Estadísticas en SWISH (NBN23)

DAVID GONZÁLEZ / DPTO. DE COMUNICACIÓN FBM
Fotos: Rocío Benítez

SEMIFINALES

CB Getafe 64 (18+12+18+16): Néstor Lasunción (15), Miguel Alarcón (2), Mario Álvarez (8), Sebastián Mbansogo, Jorge Parra (8) -cinco inicial- Jorge Tejera (4), Enrique Ortiz (3), Carlos Martos (5), Iago Ibáñez (9), Javier González (6), Raúl Robles y Pablo Rodrigo (4).

Movistar Estudiantes 74 (24+16+20+14): Miguel Sola (9), Pedro Robles (18), Pablo Orenga (12), Mateo Laguna (15), Samuel Rodríguez -cinco inicial- Rawki Zeid (3), Ignacio Rupérez (5), Jorge Alonso (2), Juan Lapastora, Vicent Negre y Alejandro Montero (10).

Árbitros: Ontescos y Argüelles.

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La experiencia del CB Getafe, un equipo heterogéneo pero con mucho oficio, contra la juventud del Movistar Estudiantes. La primera semifinal del torneo apuntaba a partidazo. Pedro Robles abrió el marcador para los colegiales y Miguel Sola prolongó la racha. Sin apenas pausa, Mario Álvarez acortó distancias... El Estu marcaba el ritmo (rápido, vertical, arriesgando en cada acción...), y el Getafe seguía el juego. Un triple de Jorge Parra y un mate de Pablo Orenga (6-9) culminaron esos primeros instantes de vértigo. Tras el tiempo muerto, el Getafe intentó cerrar la puerta, pero los jóvenes jugadores del Estu continuaron rompiendo la defensa en velocidad, con balones largos y movimientos rápidos. De ahí el 9-13 mediado el primer cuarto. El experto Getafe, con jugadores como Pablo Rodrigo o Jorge Tejera, no se quedó atrás (14-15 a 3:07) e incluso dio la vuelta al marcador (18-17), pero un parcial de 0-7 permitió al Estu apuntarse el primer cuarto.

El partido respondía a lo esperado. Un duelo de ida y vuelta, con mucha calidad en ambos bandos. Más atrevido (cosas de la edad) el Estudiantes. Un triple de Ignacio Rupérez lanzó a su equipo hasta el 20-29. Poco después Miguel Alarcón recortó distancias pero desde una posición muy forzada, que mostraba los problemas de su equipo para romper la defensa rival. Por eso, a dos minutos para el descanso, el Estudiantes había ampliado su ventaja hasta 25-37, provocando el tiempo muerto de Ramiro Pozuelo. El resto de la primera mitad apenas cambió nada: 30-40 al descanso.

La segunda parte comenzó con un 0-4 a favor del Estudiantes. Los colegiales querían resolver cuanto antes. Jorge Parra intentó evitarlo, pero, como siempre, con su par encima. Y cada intento errado del Getafe terminaba con una rápida transición del Estu...  Poco a poco, punto a punto, los jugadores de Mariano Arasa abrieron brecha hasta una máxima ventaja de 17 puntos (33-50 a 5:50). Ramiro Pozuelo tiró de artillería (Iago Ibáñez, Pablo Rodrigo, Sebas Mbansogo...) y su equipo lo agradeció. Un rebote ganado por Rodrigo terminó en el triple de Néstor Lasunción (46-53, parcial de 13-3). Y poco después Iago Ibáñez agarró otro rebote... El Estu reaccionó a tiempo y llegó al último cuarto con +12 (48-60), pero también consciente de que no podía relajarse.

Como era previsible, el CB Getafe apretó al comienzo del último acto. Un triple de Jorge Parra rompió la barrera de los diez puntos y, poco después, otro de Javier González (56-62), provocó el tiempo muerto de Mariano Arasa. La pausa funcionó y un 0-5 alejó el peligro. Sin un atisbo de relajación, concentrado en defensa y con el mismo atrevimiento en ataque (segundo triple de Pedro Robles), el Estudiantes mantuvo las distancias y se metió en la final del domingo.

Real Madrid 73 (15+19+14+25): Máximo García-Plata (13), Adrian Andzevs (7), Gildas Giménez (5), Ignacio Campoy, Sidi Gueye (12) -cinco inicial- Kyllian Michee (8), Fabian Kayser (3), Marcos Zurita (5), Declan Duru (12) y Amadou Traore (8).

Uros de Rivas 63 (13+15+19+16): Guillem Lozano (4), Daniel García Casarrubios (8), Pablo Pérez (12), Pablo López (8), Marcos Hermoso (10) -cinco inicial- Eduardo Gómez (2), Guillermo González (1), Diego Maganto, Pablo Estébanez (7) y Álvaro Biersack (11).

Árbitros: Estíbaliz y Ortín.

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La segunda semifinal tenía mucho en común con la primera. El joven (y lleno de talento) Real Madrid se medía a un Uros de Rivas más hecho. Los ripenses intentaron imponer su experiencia desde el principio, apoyados en una firme defensa, que obligaba al Madrid a tiros lejanos. El parcial de salida llegó a 0-6 antes de que Sidi Gueye volara hacia el aro. Ahí cambió todo. El Madrid empezó a aprovechar el músculo de Gueye y, sobre todo, de Amadou Traore, que sacó la falta para dejar a su equipo muy cerca (7-8). En defensa, las torres del Madrid cerraban el paso... y desde ahí tocaba volar hacia el aro contrario. Como hizo Declan Duru primero para firmar el empate a 10 y después para hacer el 15-10 con un mate espectacular.

Los ripenses reaccionaron a tiempo y recortaron tres puntos antes de cerrar el primer cuarto (15-13), pero solo fue un paréntesis en la racha de un Madrid tan físico como acertado, que arrancó el segundo período con un parcial de 7-0. Máximo García-Plata colaboró con un triple en su antigua casa, el 25-17, y poco después llegó el turno de Adrians Andzevs... Pero el Uros de Rivas no había dicho su última palabra. Los del sureste metieron una marcha más y cuando Pablo Pérez recortó hasta cinco (27-22), Javier Juárez paró el crono. El partido estaba vivo, con una sucesión de ataques (a veces demasiado precipitados), que llevaron al 34-28 del descanso.

La segunda mitad comenzó con un triple de Marcos Zurita. El Madrid golpeaba... y el Uros de Rivas respondía (triples de Álvaro Biersack y Pablo López). A 6:50, el marcador estaba en tablas (39-39), reflejando el equilibrio de un partido sin dueño. El Uros llegó a ponerse por delante (39-41, 42-43...), aunque en un tercer cuarto con mínimas ventajas para unos y otros, o más empates (44-44, 46-46...). El 48-47 del tercer cuarto dejaba todo en el aire para el último.

El Real Madrid salió del banquillo con todo... y cuando Sidi Gueye hizo el 62-53 con un mate marca de la casa a Jesús Sala no le quedó más remedio que parar el crono. Biersack certificó la resistencia de los ripenses, pero una contra perfectamente culminada por Andzevs confirmó la superioridad de un Real Madrid que buscará el domingo su segundo Torneo de la FBM (el primero fue en 2014 con Luka Doncic en la plantilla).